La gigante automotriz japonesa Toyota cerrará tres fábricas, una en el norte de Francia y dos en el Reino Unido, después de que varios países europeos suspendieran sus conexiones aéreas tras la aparición de una nueva variante del coronavirus, según fuentes concordantes.
“En vista de la esperada escasez de piezas debido a los retrasos de transporte y al carácter incierto de la duración del cierre de las fronteras para las actividades logísticas, Toyota Motor Europe, sede europea de Toyota, decidió llevar a cabo una suspensión controlada de sus actividades de producción para su planta francesa (Toyota Motor Manufacturing France) y sus dos sitios ingleses (Toyota Motor Manufacturing UK)”, indicó por email a la AFP el lunes la dirección de comunicación de la fábrica de Onnaing, cerca de Valenciennes (norte de Francia).
“En este contexto”, la planta francesa, que fabrica los Yaris y emplea a más de 4.000 personas, “ya no será abastecida a partir del martes 22 de diciembre a las 06H00” locales.
El sitio debía inicialmente cerrar el jueves por la mañana, con vistas a las fiestas navideñas.
Esta decisión podría también tener consecuencias para la planta de Polonia que fabrica los motores de los Yaris, según Thomas Mercier, delegado sindical de la planta francesa.
La producción podría reanudarse el lunes 28 de diciembre por la tarde, “si la situación evoluciona”, según la dirección.
La aparición de una nueva variante del coronavirus en Reino Unido sembró el pánico en el mundo. Decenas de países anularon los vuelos con este país, dejándolo aislado.
Francia también suspendió el domingo a medianoche y durante 48 horas todos los desplazamientos de personas procedentes del Reino Unido, “incluido los relacionados con los transportes de mercancías, por carretera, vía aérea, marítima o ferroviaria”. Solo se permite el transporte de carga no acompañado.
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