Barcelona.- El entrenador del Barcelona Ronald Koeman, admitió en la previa del partido de Liga de Campeones ante el Dinamo de Kiev, que la baja de Gerard Piqué “es muy importante”, un contratiempo “dificilísimo” de afrontar, pero que “hay que aceptarlo”.
“Sabemos que es una baja muy importante por el tiempo que lleva aquí y por lo que ha aportado. Es dificilísimo, pero hay que aceptarlo y ver cómo solucionamos el tema”, afirmó Koeman, quien dijo no saber cuánto tiempo estará el central catalán apartado de los terrenos de juego, “pero sabemos que nos serán dos semanas”.
Piqué se lesionó en el último partido de LaLiga Santander contra el Atlético de Madrid, al sufrir un esguince de grado 3 en el ligamento lateral interno con lesión parcial del ligamento cruzado de la rodilla derecha.
Con Samuel Umtiti y Ronald Araujo en la recta final de sus respectivas lesiones, el único central sano es Clement Lenglet, y Koeman sabe que aun faltan semanas para poder fichar otro zaguero en el mercado de invierno.
“Si hay alguna posibilidad, será en enero, y pueden pasar muchas cosas. Hay que dar oportunidades a los jóvenes para que jueguen y cojan minutos”, apuntó el preparador neerlandés, que no descartó dar la alternativa a Óscar Mingueza, el central del filial que últimamente se entrena con el primer equipo.
Koeman también confía en que Umtiti, con una lesión crónica en su rodilla izquierda, puede reaparecer pronto: “Sabemos que lleva bastante tiempo lesionado y esperamos que, en dos semanas, esté en condiciones de jugar. Ojalá sea así porque lleva mucho tiempo sin jugar, desde junio, y necesita recuperar mucho, pero ya está entrenando con el grupo”.
Pese a los problemas en la zaga, el entrenador del Barça quitó importancia a las carencias defensivas que arrastra el equipo en las últimas semanas, pues ha encajado goles en siete de los últimos ocho partidos.
“Tampoco veo muy débil al equipo defensivamente. Hemos de mejorar cosas, pero también ofensivamente, teniendo más efectividad”, apuntó Koeman, quien reconoció no estar “contento por los puntos” que ha conseguido el equipo en LaLiga (11 de 24), “pero sí por el trabajo” de sus jugadores.
En cualquier caso, el técnico del conjunto azulgrana negó que el bajo rendimiento del equipo se deba a su apuesta por el 4-2-3-1, y pidió zanjar el debate.
“Se pueden decir muchas cosas, pero no es un asunto de sistema. En principio, utilizamos el 4-2-3-1, pero tenemos jugadores para jugar en muchos sistemas. Parece que el Barça solo puede jugar con un 4-3-3, pero depende de las circunstancias del partido. Hay que dejar el tema del sistema”, señaló.
En Kiev no estarán mañana ni el delantero Lionel Messi ni el centrocampista Frenkie de Jong, que se han quedado fuera de la convocatoria para medirse al Dinamo por decisión técnica.
“Hemos decidido no llevar a Messi y De Jong a Kiev porque tenemos lesiones, nuestra situación en la Champions es relativamente cómoda con 9 puntos, y es el momento de descansar”, se justificó el entrenador.
Pese a todo, negó cualquier preocupación por el rendimiento deportivo y el estado anímico del ’10’. “Estoy convencido de que Messi todavía es el jugador que necesitamos”, sentenció.