Berlín,(EFE).-La ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) demandó este miércoles ante el Tribunal Constitucional la canciller Angela Merkel, a la que acusa de boicot por haber llamado a revertir una elección a escala regional obtenida con el apoyo de esa formación.
La líder alemana actuó “ilegítimamente” e incurrió en “abuso de poder”, al intervenir en contra de una decisión adoptada a nivel regional, apuntan los dos copresidentes de la AfD, Jörg Meuthen y Tino Chrupalla, según un comunicado del partido.
La elección de Kemmerich, del grupo parlamentario más pequeño de esa cámara regional, fue posible con el apoyo de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller y de la AfD.
Con ello se rompió, de facto, la consigna aprobada en dos congresos sucesivos del partido de Merkel en contra de toda cooperación política con la ultraderecha.
La cuestión provocó un terremoto político y derivó en una serie de dimisiones en cadena a escala regional, incluido el anuncio de retirada como presidenta de la CDU de Annegret Kramp-Karrenbauer, quien había tomado un año atrás las riendas del partido y a la que se consideraba favorita para suceder a Merkel.
La crisis se extendió también al Partido Liberal (FDP) de Kemmerich, que optó por disolver la cámara y convocar una nueva elección, que ganó el izquierdista y exprimer ministro regional Bodo Ramelow.
La AfD sustenta su demanda en que en la web del Gobierno federal de Merkel sigue presente esa declaración desde Sudáfrica de la canciller, lo que la ultraderecha considera una “llamada al boicot” en su contra.
El precedente de una demanda a un ministro
La demanda al Constitucional sigue a la victoria lograda por la formación ultraderechista hace unas semanas ante esa corte, relacionada asimismo con contenidos de una web oficial del Gobierno.
El tribunal afeó entonces al ministro alemán del Interior, Horst Seehofer, por haber colgado en la página de su departamento una entrevista publicada en el semanario “Der Spiegel” en la que calificaba a la AfD de partido “destructor del Estado”.
La corte consideró que ello rompía el principio de neutralidad de los servidores estatales porque aprovechó recursos oficiales para transmitir opiniones políticas.
Precisó que las declaraciones de Seehofer no eran reprochables, pero colgarla en el sitio del Ministerio vulneraba el principio de la “igualdad de oportunidades”.
La AfD es la tercera fuerza a escala nacional, tras el bloque conservador de Merkel y sus socios de coalición socialdemócratas.
Tiene escaños en las cámaras regionales de los dieciséis “Länder”, pero está descartada por el resto del espectro parlamentario como aliada, directa o indirecta, en cualquier constelación de gobierno.
