Sao Paulo, EFE.- El coronavirus podría estar circulando en Brasil, uno de los epicentros de la pandemia, desde noviembre del año pasado, lo que supone tres meses antes de la confirmación del primer caso de COVID-19 en el país y en Latinoamérica, informaron este jueves fuentes académicas.
Un estudio preliminar de la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC) de Brasil, realizado en conjunto con la española Universidad de Burgos, identificó la presencia de cepas del Sars-CoV-2, transmisor de la COVID-19, en los alcantarillados de la ciudad de Florianópolis, capital del estado brasileño de Santa Catarina, ya en noviembre.
Las “partículas del nuevo coronavirus” fueron encontradas “en dos muestras del alcantarillado de Florianópolis recogidas el 27 de noviembre de 2019”, tres meses antes “de que el primer caso clínico fuera relatado en Brasil”, explicó la UFSC en un comunicado divulgado hoy.
Brasil confirmó el primer diagnóstico positivo para COVID-19 el pasado 26 de febrero, lo que supuso también el primer caso de la enfermedad en Latinoamérica.
El estudio, que todavía no fue sometido a revisión, analizó muestras congeladas de alcantarillado bruto recogidas entre octubre de 2019 y marzo de 2020 con el objetivo de investigar el material como “herramienta epidemiológica”.
La carga vírica constatada el 27 de noviembre fue de 100.000 copias de genoma del virus, aunque las cargas fueron aumentando en los dos análisis consiguientes (11 de diciembre y 20 de febrero) hasta alcanzar el millón de copias de genoma por litro de alcantarillado el pasado 4 de marzo.
“Eso demuestra que el SARS-CoV-2 estaba circulando entre la comunidad varios meses antes de que el primer caso fuera reportado por las autoridades regionales, nacionales y panamericanas”, apunta la investigación, publicada esta semana en la plataforma científica medRxiv.
Gislaine Fongaro, una de las autoras del estudio, señaló en una rueda de prensa que los primeros resultados han generado “cierta desconfianza” entre el equipo de investigadores, por lo que repitieron las pruebas y lograron rastrear el genoma del virus.
“Hemos tenido el cuidado de realizar una prueba interlaboratorial, no solo con un único marcador vírico, sino que varios marcadores del virus fueron utilizados para la confirmación”, señaló la investigadora, quien agregó que todos los autores están “bastante tranquilos respecto al resultado”.
Los investigadores mencionan también una iniciativa similar llevada a cabo en la ciudad de Murcia, en el sur de España, donde igualmente se han identificado cepas del coronavirus antes de los primeros casos reportados en el país ibérico, uno de los más golpeados por la emergencia sanitaria.
Apuntaron además que, pese a que los primeros casos de la enfermedad en la ciudad china de Wuhan, el foco inicial de la pandemia, fueron registrados en diciembre, hay “evidencias indirectas que sugieren que el virus ya circulaba algunos meses antes” en la región, así como indican investigaciones similares realizadas en Italia y otros países.
“Si pensamos que el virus tarda de 15 a 20 días para crear una infección aguda y que en diciembre ya había personas muriendo de COVID-19 en Wuhan, en China, es obvio que el virus ya circulaba entre la población mucho antes”, sostuvo Fongaro.
En poco más de cuatro meses, Brasil se ha convertido en el epicentro latinoamericano de la pandemia del nuevo coronavirus y es el segundo país del mundo más golpeado por la enfermedad, con más de 60.000 muertos y casi 1,5 millón de infectados.