El condado de Lincoln, en el estado de Oregón (EE.UU.), ha emitido una orden para fomentar el uso obligatorio de mascarillas como una de las medidas para impedir nuevas infecciones por coronavirus. Sin embargo, la directriz señala que las “personas de color” no necesitan cumplir la medida.
Las autoridades sanitarias locales justifican la decisión en el incremento de la preocupación sobre “el perfil racial y el acoso debido al uso de cubiertas para la cara en público” con el fin de evitar episodios de discriminación.
Algunos activistas consideran que las mascarillas faciales ponen en riesgo a ciertas comunidades.
Según la directora del programa de Justicia Racial de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), las reglas de máscaras obligatorias colocan a las personas de color en una “situación de perder-perder” con consecuencias potencialmente mortales.
“No usar un pañuelo protector va en contra de las recomendaciones de los CDC [Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU.] y aumenta el riesgo de contraer covid-19, pero usar uno podría significar poner sus vidas en riesgo de recibir un disparo o ser asesinado debido a la discriminación racial”, argumentó Moore.
Por otra parte, la orden también exime a las personas con ciertas condiciones de salud que les impidan el uso de las mascarillas, niños menores de 12 años y personas con discapacidades.
Asimismo, los funcionarios señalaron que “ninguna persona intimidará ni acosará a las personas que no cumplan” con la disposición del condado, emitida el 16 de junio.