El ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, pidió sanciones drásticas contra los auspiciadores de la concentración masiva de personas en Puerto Plata, motivada por la marcha del peregrino Mildomio Adames.
Calificó como un desatino la actividad pública que echa por la borda todos los esfuerzos realizados días anteriores por Salud Pública para tratar de contener la enfermedad.
Sánchez Cárdenas dijo que luego de la concentración de cientos de personas, propondrá el establecimiento de un cordón epidemiológico en esa demarcación.
“Pedimos a Puerto Plata y a todo el país sanciones drásticas para los auspiciadores de esta vagabundería, que no se le pueda dar otro nombre”, afirmó.
Sánchez Cárdenas dijo que las autoridades policiales, municipales y civiles debieron utilizar hasta la fuerza si era necesario para impedir la aglomeración de personas.
Dijo que el alcalde Diomedes Roquelito García no puede alegar ignorancia de todo el despliegue hecho por las autoridades para contener la enfermedad.
“Lo que se hizo allí fue un sacrilegio social y es no se puede permitir”, aseveró.
Indicó que en la actividad se usaron, además del vehículo el disco light del alcalde, camiones de bomberos que también opera el ayuntamiento.
Explicó que aunque el alcalde lo niegue, todos los puertoplateños saben que él y otros dirigentes políticos auspiciaron la actividad.
Indicó que en su paso por Bonao, La Vega y Santiago, el peregrino pasó solitariamente, sin concitar respaldo multitudinario y todo cambió desde que llegó a la Novia del Atlántico.
Dice que la ley es clara y se establece sanciones a autoridades electivas cuando se viola el estado de emergencia.
“Eso no fue una actividad religiosa, eso fue actividad verdaderamente política. Se violó el estado de emergencia de manera grosera, sin respetar los principios más elementales”, indicó.
