El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) calificó este miércoles como “ambiguo y complaciente” el informe de auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre las fallidas elecciones municipales del pasado 16 de febrero.
El presidente del PRSC, Federico (Quique) Antún Batlle, dijo que esa auditoría para identificar las causas por las cuales no fue posible la correcta implementación del Voto Automatizado en esos comicios “busca complacer a todos los sectores, desde la Junta Central Electoral (JCE) hasta algunos partidos políticos”.
Señaló que por esa razón la JCE sale defendiendo el informe y lo propio hacen el partido de gobierno (PLD), al que se acusaba de cometer irregularidades, y el Partido Revolucionario Moderno (PRM), que fue víctima de falsas acusaciones y que incluso fue detenido de manera arbitraria un oficial de la escolta del candidato presidencial de esa organización y lo mismo ocurrió con un técnico de una compañía telefónica.
Indicó que no entiende como puede ser motivo de festejo para la JCE el hecho de que el informe de la OEA “transparentara la incapacidad del personal en general para montar unas elecciones, como las que fueron suspendidas el pasado 16 de febrero del año en curso”.
El líder reformista resaltó que el PRSC había advertido que el sistema implementado en las elecciones municipales era muy vulnerable, como lo expresa el informe de la OEA, “lo que demuestra que pudo haber recibido ataques externos”.
Quique Antún, quien ofreció sus declaraciones durante una conferencia de prensa virtual en la que participaron periodistas de diferentes medios de comunicación, señaló que dicho informe habla del mal diseño del software y la falta de herramientas para detectar o prevenir la falla tiempo”.
“Entonces cómo pueden funcionarios de la JCE estar celebrando este informe, cuando la OEA responsabiliza a esa institución electoral del colapso de las elecciones municipales del pasado 16 de febrero”, dijo.
Modificación del Software
El presidente del Partido Reformista indicó que igualmente habían advertido que esa auditoría de la OEA “no sería capaz de develar si hubo una modificación intencional del software luego de que el IFES había generado el Código de Seguridad (Hash)”.
J.S