En ocasión de celebrarse este martes 7 de abril el Día Mundial de la Salud, el ministro de Educación, Antonio Peña Mirabal, felicitó a todos los servidores y colaboradores de ese sector que arriesgan sus vidas para ayudar a los demás en medio de la pandemia mundial de coronavirus, además de reconocer que sin sus intervenciones no habría forma de salir de la crisis como se está haciendo.
Este año la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo dedicó al personal de enfermería y partería, por lo que el titular del MINERD destaca el papel fundamental de esos profesionales, que comprenden más del 50 % de los miembros sanitarios, sin los cuales sería imposible garantizar el estado de bienestar de la población en el mundo, especialmente la dominicana que enfrenta de forma efectiva el virus con la intervención estatal, precisó el funcionario.
“Felicitamos a todo el personal de salud en su día, destacando el protagonismo que tienen las enfermeras y enfermeros, no solo con esta pandemia, sino desde siempre. El cuidado y atención de los pacientes recae directamente en este sector y esa labor de servicio solo se logra con una sensibilidad humanitaria sin límites”, expresó Peña Mirabal.
En ese sentido, el ministro dijo que la labor heroica del personal de salud en este momento evidencia la importancia para la humanidad de la educación, porque solo se consiguen buenos profesionales de la medicina con una formación sólida que inicia desde sus primeros años de escolaridad.
“Hoy vemos lo importante que es para la salud mundial tener profesionales de la más alta calidad y eso solo se logra priorizando la educación preuniversitaria y universitaria. La circunstancia sigue demostrando que el proceso eficaz de enseñanza-aprendizaje es lo que nos garantiza la estabilidad social, económica, cultural y sobre todo la salud”, manifestó.
Peña Mirabal hizo extensiva las felicitaciones al Colegio Dominicano de Profesionales de Enfermería (CODOPENF), la Asociación Nacional de Enfermería (ASONAEN); a los sindicatos que conforman el sector en República Dominicana y a todas las enfermeras y enfermeros de los sectores público y privado que brindan un servicio invaluable para garantizar la vida de los pacientes, especialmente ante este reto que cruza el mundo y que asegura se superará.
Ramón Santana Alvarez
