La Comisión para atender Asuntos Económicos y de Empleos y el Consejo Nacional de Competitividad (CNC) celebraron una reunión para evaluar las recientes disposiciones económicas establecidas por el gobierno y el Banco Central.
El encuentro, realizado en la sede del Banco Central, fue encabezado por el ministro de Hacienda Donald Guerrero, el gobernador del Banco Central Héctor Valdez Albizu, y el ministro de Economía Juan Ariel Jiménez. Participaron también el ministro de Industria, Comercio y Mipymes Nelson Toca, el ministro de Trabajo Winston Santos, el director general de Impuestos Internos Magín Díaz, y el director general de Aduanas Enrique Paniagua.
Por el sector privado, encabezaron la reunión Pedro Brache, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) y Celso Juan Marranzini, presidente de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), con la asistencia, entre otros, de Luis Molina Achécar, presidente de la Federación Dominicana de Instituciones Financieras y representante de la Asociación de Bancos Comerciales ABA, Paola Rainieri, presidenta de la Asociación Nacional de Hoteles, Bares y Restaurantes ASONAHORES y Federico Domínguez Aristy, presidente de la Asociación Dominicana de Zonas Francas ADOZONA.
En la reunión, el ministro de Hacienda Donald Guerrero explicó que las medidas tomadas por el gobierno han priorizado la salud y alimentación de la población, y llamó a todos los sectores a actuar con responsabilidad con la finalidad de preservar vidas y mantener la estabilidad social y económica del país.
Dijo que las autoridades están abiertas a las sugerencias y solicitudes del sector empresarial para ir haciendo los ajustes de lugar a las medidas que han sido tomadas, de manera que también se proteja el aparato productivo nacional.
De su lado, el gobernador del Banco Central Héctor Valdez Albizu anunció que actualmente se están elaborando los instructivos sobre la distribución de los recursos liberados con autorización de la Junta Monetaria para hacer frente al impacto económico del COVID-19.
Indicó que, aunque las pérdidas para el sector turístico se estiman preliminarmente, en términos netos, entre US$400 y US$500 millones de dólares, al tomar en cuenta que el mayor flujo de remesas, de inversión extranjera directa (IED) y la disminución significativa de los precios del petróleo, compensarán parcialmente su impacto en términos de Balanza de Pagos.
Aseguró que “la política monetaria cuenta con suficiente espacio para continuar reaccionando oportunamente. Es decir, que si hay que facilitar más recursos de los anunciados, lo haremos”. Recordó que, entre otras acciones, la Junta Monetaria y el Banco Central autorizaron medidas de provisión de liquidez por unos 52 mil millones de pesos y la reducción de la tasa de política monetaria en 100 puntos básicos.
Valdez Albizu garantizó el adecuado flujo de divisas en el mercado cambiario a través de la provisión de divisas por más de US$500 millones de dólares por parte del Banco Central. En ese sentido, destacó que el Banco Central posee reservas internacionales de más de nueve mil millones de dólares, superiores al 10% del Producto Interno Bruto (PIB) y equivalentes a más de cuatro meses de importación, indicadores considerados por el Fondo Monetario Internacional como adecuados para la cobertura de reservas internacionales de un país.
El gobernador llamó a los agentes económicos y la ciudadanía en general a mantener la calma pues los fundamentos económicos del país se mantienen fuertes.
Por su parte, el presidente del CONEP Pedro Brache elogió las recientes medidas tomadas por las autoridades dada la compleja situación económica a la que han de enfrentar los dominicanos por los efectos del coronavirus, y mostró la voluntad de esa entidad de contribuir con sus esfuerzos a paliar las consecuencias negativas que puedan acarrearse.
En ese mismo sentido, el presidente de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) Celso Juan Marranzini exhortó a los empresarios a colaborar con las autoridades nacionales para gestionar exitosamente el impacto del COVID-19, a la vez que solicitó fortalecer la comunicación entre los distintos sectores involucrados para evitar daños indeseables.
Durante el encuentro, los empresarios expresaron su interés por precisar en lo posible algunos aspectos recogidos en las disposiciones emitidas por las instituciones, con el fin de poder adaptarlas y cumplirlas eficazmente en cada uno de sus ámbitos. Para ello, fueron abordados elementos hasta ahora poco usuales en el régimen laboral dominicano, como el teletrabajo y la suspensión temporal de labores, aconsejados por las autoridades sanitarias para evitar el contagio del virus.
De igual forma, mostraron su preocupación por los daños que esta situación provocaría en el turismo como sector neurálgico de la economía dominicana, manifestando su inquietud por lo complejo que es determinar cuánto tiempo durará este grave problema sanitario.
Refiriéndose a las necesidades prioritarias actuales, solicitaron que tanto los aeropuertos como las empresas generadoras de electricidad permanezcan activas de forma permanente a fin de evitar un mayor daño al sector.
En lo concerniente al sector de Zonas Francas, sus representantes indicaron que pueden seguir en operación respetando las recomendaciones de las autoridades sanitarias, aunque se han adoptado decisiones de enviar, por el momento, a una parte de sus recursos humanos a sus hogares.
También señalaron las inquietudes originadas por el cierre de la frontera con Haití por parte del país vecino, lo que pudiera afectar sensiblemente al sector exportador, especialmente el relacionado con la fabricación de ropa.
Igualmente, se habló sobre la contribución que pueda hacer el sector financiero a través de la reestructuración de créditos y el ajuste de tasas de interés; las facilidades que otorgará la Dirección General de Impuestos Internos para el pago de tributos; la importancia de que se mantenga el abastecimiento de alimentos, medicamentos y productos básicos a la población; y la necesidad de postergar el plazo de los actos de alguacil hasta que el sistema judicial recupere su ritmo habitual.
El empresario Manuel Estrella solicitó que se permita al sector construcción seguir operando, tomando en cuenta la gran cantidad de empleos que genera y su efecto multiplicador en amplios sectores nacionales.
Los asistentes al encuentro acordaron mantener abiertos los canales de comunicación entre todas las entidades representadas para dar seguimiento a las medidas y evaluar resultados.
En la reunión participaron también César Dargam, Felipe Vicini, José Miguel González Mario Lama, y Circe Almánzar, entre otros.