Por: Edgar Raffa
Santo Domingo.- La Junta Central Electoral (JCE), a través de su Dirección de Informática, informó este jueves que el sistema de voto automatizado contará con una actualización de la versión al software de los equipos que se utilizarán en las elecciones del próximo 16 de febrero.
La nueva versión cambió a 3.0, porque era muy larga.
Así lo manifestó el director de informática de la JCE, Miguel Ángel García, quien además detalló que se han aplicado protocolos de seguridad sugeridos por parte de los partidos políticos, la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (IFES) y la empresa auditora Pro V&V.
“Eso fue probado prácticamente hace unas dos semanas, y luego de la llegada del IFES la semana pasada se hicieron una serie de sugerencias de seguridad, que no tienen que ver con el software en sí,que también ha sido incorporadas”, dijo García.
La sugerencias componen un hash, o código numérico de encriptación, que es una contraseña que se le coloca a cada base de datos, el mismo calcula una serie de números para determinar que el objeto de la base de datos no han sido alterados.
“Tiene nueve elementos de seguridad que no permite que la data sea alterada, y si lo es, tenemos la facilidad de como detectarlo”, precisó García.
Explicó que cuando entra un dato, y no coinciden los valores, automáticamente toma la data y la separa para detectar la anomalía.
Además, se incluyen una llave de encriptación y el papel que se imprima coincidirá con la relación de votos. Las aplicaciones de seguridad fueron observadas por los representes de IFES vía Skype.
Jack Cobb, representantes de la entidad, aseguró vía telefónica que es el mismo código fuente que se descomprimió ayer, se compiló y cerró la última versión. Inmediatamente se terminó la compilación y se crearon los hash.
A los delegados de los partidos se les entregó las contraseñas de seguridad en un CD para que puedan calcular y comprobar los mismos valores al proceso de la clonación, que iniciará a las 4:00 de la tarde. Los cambios de seguridad tuvieron un costo aproximado de un millón de dólares.