El Papa Francisco, de 88 años, recibió el martes una buena noticia de sus médicos: ya no está en peligro inminente de muerte por la neumonía bilateral que lo ha mantenido internado casi un mes. Sin embargo, su estado sigue siendo delicado y permanecerá varios días más en el hospital Gemelli para continuar el tratamiento.
Aunque su evolución es positiva, los médicos son cautelosos y advierten que aún falta un proceso de recuperación. Francisco, quien padece una enfermedad pulmonar crónica, sigue necesitando oxígeno suplementario durante el día y usa una máscara de ventilación por la noche para respirar mejor.
Según el reporte del Vaticano, el papa despertó a las 8:00 a. m. tras una noche tranquila. También señalaron que ha mostrado mejoría en los últimos días, con análisis de sangre favorables y buena respuesta a los medicamentos.
El lunes, los médicos retiraron el diagnóstico “reservado” con el que había sido ingresado el 14 de febrero, lo que indica que ya no está en estado crítico. Sin embargo, su edad y salud frágil obligan a mantener la vigilancia.
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“El tratamiento debe continuar en un entorno hospitalario durante algunos días más”, señaló el comunicado del Vaticano.
A pesar de su estado, el Papa Francisco sigue pendiente de sus funciones. El lunes participó por videoconferencia en un retiro espiritual vaticano, actividad que continuará esta semana. Además, ha sido informado sobre las inundaciones en Argentina, su país natal, y envió un mensaje de solidaridad a los afectados.
Esta semana marca también fechas importantes para el pontífice: el martes cumplió 67 años desde su ingreso en la orden jesuita, y el jueves se celebra el 12° aniversario de su elección como Papa.
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Mientras el papa sigue hospitalizado, en Roma han surgido rumores y especulaciones sobre su salud y el futuro de su papado. Un tema que llamó la atención fue la supuesta intrusión del activista Juan Grabois en el hospital, algo que él negó.
El cardenal Michael Czerny, cercano al papa, le envió una carta a Grabois asegurando que Francisco estaba al tanto de su presencia en Roma y que valoraba su apoyo. También rechazó las versiones de que Grabois intentó entrar por la fuerza al hospital.
El Vaticano, como es habitual, sigue siendo un hervidero de rumores, con especulaciones sobre un posible cónclave. Sin embargo, Francisco sigue con vida y al mando de la Iglesia, aunque su recuperación aún no está completa.
AP
Por: Itzel Olivo
