KIEV, Ucrania (AP) – En un ataque masivo, Rusia bombardeó la infraestructura energética de Ucrania durante la noche con misiles y aviones no tripulados, horas después de que el presidente Volodymyr Zelenskyy anunciara que la próxima semana se llevarían a cabo conversaciones con Estados Unidos para intentar poner fin a la guerra que ha devastado el país durante tres años.
El ministro de Energía ucraniano, Herman Halushchenko, informó sobre el ataque a través de Facebook, describiéndolo como un bombardeo “masivo con misiles y drones”. Al menos diez personas, incluyendo un menor, resultaron heridas, según las autoridades locales.
Halushchenko criticó duramente las acciones de Rusia, afirmando que “Rusia está intentando infligir sufrimiento a los ucranianos atacando instalaciones de producción de energía y gas, buscando dejarnos sin luz ni calefacción, y causar el mayor daño posible a la población civil”.
Este ataque es parte de una estrategia recurrente de Rusia, que ha atacado repetidamente la red eléctrica ucraniana desde el inicio del conflicto. Las fuerzas de Moscú han logrado reducir la capacidad de generación eléctrica de Ucrania y han interrumpido el suministro de calefacción y agua, especialmente durante los meses de invierno, lo que ha sido descrito por funcionarios ucranianos como un intento deliberado de usar el frío como un “arma” para minar la moral de la población civil.
De acuerdo con la fuerza aérea ucraniana, Rusia disparó 67 misiles desde aire, tierra y mar, y lanzó 194 drones, tanto de ataque como de señuelo. El objetivo principal de estos ataques fueron las instalaciones de extracción de gas natural, esenciales para el suministro energético del país.
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Por primera vez, Ucrania utilizó sus aviones de combate Mirage-2000 franceses, entregados hace un mes, para repeler el ataque. Además, las fuerzas aéreas ucranianas emplearon los aviones de combate F-16 suministrados por Occidente para derribar los misiles rusos.
Gracias a las defensas ucranianas, se lograron derribar 34 misiles y 100 drones. Además, hasta 10 misiles no alcanzaron sus objetivos, y 86 drones desaparecieron de los radares, probablemente neutralizados por la guerra electrónica.
El presidente Zelenskyy había anunciado previamente que las conversaciones con Estados Unidos se realizarán la próxima semana, como parte de los esfuerzos para alcanzar una resolución diplomática del conflicto, que continúa afectando gravemente tanto a las fuerzas militares como a la población civil de Ucrania.
