Este viernes, un coronel de las Fuerzas Armadas de Ecuador fue asesinado en un ataque a tiros ocurrido cerca de la penitenciaría de Guayaquil, en el suroeste del país. El asesinato es el último episodio de violencia en Ecuador, un país azotado por la lucha entre bandas criminales ligadas al narcotráfico.
El coronel Porfirio Cedeño fue sorprendido por sicarios que abrieron fuego contra su vehículo mientras se dirigía a una ceremonia en la ciudad de Manta, en la costa. Según el informe de la Policía, los sicarios dispararon al menos 20 veces, alcanzando al oficial a unos 200 metros de la penitenciaría de Guayaquil. El conductor del vehículo también resultó herido en la pierna durante el ataque.
Este nuevo crimen resalta la creciente violencia que azota a Ecuador, donde los carteles de narcotráfico luchan ferozmente por el control de las rutas de la cocaína que van hacia Estados Unidos y Europa, usando puertos estratégicos como Guayaquil.
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El coronel Cedeño, quien se desempeñaba como comandante del Grupo de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, viajaba en una camioneta gris que quedó completamente impactada por los disparos. La camioneta, con vidrios rotos y las puertas llenas de impactos, quedó abandonada en medio de la vía.
El ataque se produjo alrededor de las 07:30 hora local (12:30 GMT), según fuentes locales. Aunque el coronel Cedeño trabajaba habitualmente en el norte de Guayaquil, esta vez se dirigía a Manta para asistir a un acto oficial. Ambas ciudades, que están ubicadas en la costa ecuatoriana, son especialmente golpeadas por la violencia vinculada al narcotráfico.
El expresidente Rafael Correa, quien conocía personalmente al coronel Cedeño y lo recordaba con cariño, lamentó su muerte a través de un mensaje en la red social X. “Fue parte de mi seguridad cuando era capitán. Un querido amigo”, escribió Correa.
La Policía informó que en el lugar del ataque se encontraron más de 20 indicaciones balísticas, lo que confirma la magnitud del ataque. Los sicarios iban en otro vehículo, que se cree estaba escoltando al coronel en el momento del tiroteo.
Este crimen es solo uno más en una ola de violencia que no cesa a pesar de las políticas de seguridad del presidente Daniel Noboa. Ecuador sigue siendo uno de los países más violentos de la región, con un récord de 47 homicidios por cada 100,000 habitantes en 2023, aunque la cifra disminuyó a 38 en 2024, según datos oficiales.
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Por: Itzel Olivo
