Donald Trump volverá a la presidencia como el 47mo mandatario de Estados Unidos este lunes, tras superar juicios políticos, acusaciones criminales y hasta intentos de asesinato. Su regreso al poder se da con un control total de los republicanos en Washington, lo que le permitirá implementar cambios importantes en las instituciones del país.
Después de la ceremonia de juramentación, Trump planea firmar órdenes ejecutivas enfocadas en deportaciones, fomentar la exploración de combustibles fósiles y reducir protecciones laborales en el gobierno. Prometió que su gobierno traerá “fuerza, prosperidad, dignidad y orgullo” a los estadounidenses.
La ceremonia se realizará en la Rotonda del Capitolio debido al frío, y el desfile inaugural será reemplazado por un evento en un estadio. Miles de simpatizantes que llegaron a Washington deberán buscar otros lugares para presenciar las celebraciones. Para Trump, este momento marca un regreso histórico, tras haber dejado la presidencia hace cuatro años en medio de la pandemia del COVID-19 y una crisis económica.
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A pesar de su derrota en 2020, Trump nunca perdió su influencia dentro del Partido Republicano. Logró superar casos criminales y mantenerse como líder indiscutible del partido, apelando al descontento popular con la inflación y la inmigración. Este lunes hará historia como el primer presidente condenado por un delito grave en asumir el cargo.
Durante su segundo mandato, Trump busca avanzar más rápido en su agenda política. Entre sus planes están endurecer la política migratoria, imponer aranceles y deshacer medidas climáticas y sociales de los demócratas. En el ámbito internacional, continuará con su política de “Estados Unidos Primero”, generando dudas sobre el futuro de las alianzas del país.
El lunes iniciará con una ceremonia religiosa y un encuentro con el actual presidente Joe Biden, antes de dirigirse juntos al Capitolio. En su discurso, se espera que Trump prometa perdonar a muchos de los involucrados en el ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021, reforzando su postura de proteger a sus seguidores más leales.
Los cambios no solo impactarán la política, sino también a la fuerza laboral federal y sectores tecnológicos. Trump planea eliminar programas de diversidad, promover el regreso al trabajo presencial y fomentar más perforaciones de petróleo y gas. Líderes empresariales como Elon Musk y Mark Zuckerberg estarán presentes en su toma de posesión, mientras Trump promete mostrar avances inmediatos en temas clave como la seguridad fronteriza.
El Congreso, ahora dominado por los republicanos, trabajará en conjunto con Trump para revertir políticas de la era Biden. Según el senador Ted Cruz, se espera que el nuevo gobierno actúe rápidamente para cumplir sus promesas, destacando los cambios que vendrán desde el primer día.
AP
Por: Itzel Olivo
