Las elecciones presidenciales en los Estados Unidos contarán con aproximadamente 240 millones de votantes elegibles. Sin embargo, serán solo unos pocos millones en un puñado de Swing States (estados bisagra) quienes probablemente decidirán quién se convertirá en el próximo presidente de la principal potencia del mundo.
Con las votaciones anticipadas en marcha, las campañas de Donald Trump y Kamala Harris cerrando sus estrategias y los electores decidiéndose rumbo al 6 de noviembre, es importante conocer la importancia de estos territorios y qué necesitan los candidatos para salir vencedores en ellos.
Qué es un estado bisagra o Swing State
Se trata de aquel estado que osciló entre candidatos o partidos políticos diferentes en elecciones recientes, por lo que el resultado electoral es difícil de predecir. Estos lugares se caracterizan por tener una población electoral dividida casi equitativamente entre diferentes tendencias políticas, lo que los convierte en cruciales para determinar el resultado final.
Georgia
Con 16 votos del Colegio Electoral, Georgia representa un campo de batalla crucial.
La campaña de Harris está enfocada en reconquistar este estado, mientras que el Partido Republicano se esfuerza por asegurar los bloques de votantes esenciales en áreas como Atlanta. Trump ha enfrentado acusaciones de conspiración para anular su derrota aquí, lo cual aún complica su posición.
Michigan
Michigan, con 15 votos del Colegio Electoral y una población de diez millones, ha sido símbolo de fluctuaciones electorales.
La postura de Harris sobre Israel y Gaza podría afectar significativamente su apoyo en esta región. Trump, por su parte, ha hecho énfasis en la importancia de Michigan en su camino hacia la victoria; la economía y el apoyo latino también juegan un papel esencial en la decisión de los votantes aquí.
Nevada
El Estado Plateado, que aporta 6 votos del Colegio Electoral, ha mostrado señales de un posible cambio hacia los Republicanos.
Alrededor del 40% de los votantes elegibles son latinos, afroamericanos o asiático-americanos del Pacífico, grupos que suelen apoyar más a Harris. Sin embargo, la lenta recuperación económica post-COVID y una tasa de desempleo del 5.1% podrían inclinar la balanza a favor de Trump, quien promete un retorno a una agenda de más bajos impuestos y menos regulaciones.
Pensilvania
Con 19 votos electorales, emerge como el estado más crucial entre los Swing State.
La inflación y el costo de la vida se han incrementado más rápidamente en esta ubicación que en otros estados, lo que ha afectado significativamente a la población. El estado se ha convertido en un epicentro donde ambos candidatos están concentrando esfuerzos significativos.
Wisconsin
Wisconsin, conocido por tener elecciones disputadas por márgenes estrechos, cuenta con 10 votos del Colegio Electoral.
Ha sido el sitio de convenciones tanto para los Demócratas como para los Republicanos, subrayando su importancia en este ciclo electoral.
Carolina del Norte
Con casi once millones de habitantes y 16 votos electorales, Carolina del Norte es otro campo de disputa.
Las encuestas se han apretado en este estado después de que Harris asumiera su lugar en la cima del boleto demócrata, lo que convierte este estado en un auténtico campo de batalla.
Arizona
El estado del Gran Cañón, con una población de 7.4 millones y once votos electorales, ha vuelto su atención a los debates nacionales como la inmigración y el derecho al aborto.
Este estado ha sido fundamental en el debate sobre la inmigración y ha observado una disminución en los cruces fronterizos, lo que ha llevado a preocupaciones significativas entre los votantes.
La postura de Trump sobre la deportación masiva y su ataque a Harris en cuanto a políticas migratorias podría influir en sus resultados.
Fuente: Infobae
Publicado por: Yari Araujo