Por: Ling Almánzar
El Congreso Nacional se ha abierto para recibir a representantes de los sectores nacionales que acudieron a fijar su posición frente al proyecto de reforma fiscal. Entre todos se oyó una sola voz: los riesgos y perjuicios que traería esa reforma. El rechazo fue prácticamente unánime.
Según Santiago Sicard, presidente de la Asociación Dominicana de Sociedades de Administradoras de Fondos de Inversión (Adofasi), la reforma desmantelaría el mercado de valores y amenazaría los ahorros de pequeños empresarios e inversionistas. Expresó preocupación y propuso revisar algunas exenciones fiscales.
Cristian Molina, líder de la Asociación de Fiduciarias Dominicanas (Asofidom), dijo que se arruinarían los fideicomisos si pasa la reforma y que deben permanecer fiscalmente “neutros”, sin pagar impuestos directos (solo el 10% de impuesto sobre la renta, como sucede en otros países).
Yris Nelsi González, de la Asociación de Concesionarios de Fabricantes de Vehículos (Acofave), dejó su “profunda preocupación” por que se dispararían los impuestos que pagan los vehículos.
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Moisés Montás, secretario general del partido Dominicanos por el Cambio, sugirió no apresurar la reforma y sincerar el aumento del gasto, así como ampliar el Régimen Simplificado de Tributación hasta las empresas que tengan una facturación de 20 millones de pesos.
Hans García, el presidente de Adocine, realzó que en la industria del cine se pagan impuestos y que, solo el año pasado, se pagaron solo de Itbis RD$1,161,496,552.6, y otros RD$348,979,516.10 por retención de impuestos sobre la renta a personas físicas.
Expuso que los empleos de la industria cinematográfica estarían en jaque por la reforma, y apuntó que 150 millones de dólares que se inyectan por las producciones que se filman en el país; solo el año pasado entraron más de 12 mil millones de pesos por esos rodajes.
Mario Pujols, vicepresidente de la Asociación de Industria de República Dominicana (AIRD), advierte que la forma en que está redactado el proyecto “pone en juego a todo un andamiaje productivo nacional”, y reconoció la necesidad del Estado de recaudar más recursos
Dijo que sería “grave error” eliminar un artículo 50 de ProIndustria, que otorga facilidades sobre depreciación acelerada, crédito por inversión y la no inclusión de activos adquiridos…
Dejó claro que el sector industrial pide en materia de derechos adquiridos el mismo tratamiento que se les otorga a otros sectores en cuanto a exenciones fiscales.
Pidió revisar los gravámenes que se que tomen en cuenta alcoholes, azúcar añadida, calzados, cine, reembolsos de combustible en energía
La Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (CADOAR) dejaron constancia su rechazo y su advertencia de que los seguros se incrementarían.
José Manuel Torres, de Adozona, : modifica la Ley sobre Centros Logísticos, un impuesto superior al 40% por ventas al mercado local, ; se pondrían en riesgo miles de empleos.
César Dargam, representante de la cúpula empresarial, observó que solo 33 centavos de cada peso se están recaudando, y que otros 46 centavos se escapan en deficiencia, comercio ilícito y otras fugas.
La Asociación Dominicana de Exportadores (Adoexpo) también se quejó. Claro, expresó que no se opone a una reforma fiscal, pero pidió consenso para hacerla.
Waldo Ariel Suero, el líder del Colegio Médico, exigió la eliminación del anticipo de impuesto sobre la renta a las personas físicas, no gravar los alimentos ni los gastos educativos.
Acoprovi exigió reducir el Impuesto al Patrimonio Inmobiliario (IPI) y otras reivindicaciones.
Rosmery Bonifacio, una inquieta activista social, pidió transparentar la Ley de Hidrocarburos y otras iniciativas, así como mayores niveles de eficientización pública y estatal.
La Asociación de Banco Múltiples de la República Dominicana (ABA) advirtió que muchos ahorros se irían al sector informal o al extranjero, lo que estrecharía la base de ahorros y ejercería efectos negativos sobre el peso dominicano.
El combativo y rebelde Juan Hubieres, un dirigente político y empresario del transporte, también se pronunció en contra y cuestionó al Gobierno.
