Varios expertos ambientalistas aseguraron que para la realización de cualquier proyecto minero en República Dominicana, como el caso de la grancera en el distrito municipal de El Cachón, provincia Barahona, se requiere del permiso social ambiental, que es el que otorga la comunidad y que está contemplado en la ley.
Así coinciden Luis Carvajal, director de la Comisión Ambiental de la UASD; Fernando Peña, coordinador del Observatorio de Políticas Públicas de la UASD; y Maritza Ruiz, investigadora en término de industria extractiva.
Carvajal, quien además es miembro de la Academia de Ciencias, consideró que en el proyecto que se está planteando en El Cachón todavía no hay un permiso y que cualquier tipo de extracción que haya es irregular y constituye una violación que demanda la intervención de las autoridades.
Apetito del gobierno y el incumplimiento de la ley
Al respecto, Fernando Peña manifestó que lo que está pasando en El Cachón es una muestra de lo que pasa en ciertas áreas del país con el tema minero.
“El gran problema que está planteado es la irracionalidad con que el Gobierno aborda el tema de la industria minera y de todas las industrias extractivas, la minería no metálica y la metálica”, destacó.
Dijo que en esos proyectos mineros no se hacen consultas como lo estipula la ley y que las simulan y ponen a los propios beneficiarios de las iniciativas mineras a hacer las consultas y las validan.
Se necesita escuchar al pueblo
En tanto que Maritza Ruiz lamentó que las autoridades no escuchen a las comunidades y que no desempeñen su rol de supervisión.
“Penosamente no se escuchan las voces del pueblo, si tú vas a El Cachón y haces una consulta a todas las comunidades te van a decir cuál es su sentir. La supervisión del Gobierno es lo que digan las mineras, porque lo que se privilegia y a lo que se le da importancia es que paguen y eso ayude a financiar un presupuesto público”, consideró la experta.
Autoridades deben consultar las comunidades
Luis Carvajal, de la Comisión Ambiental de la UASD, dijo que los reglamentos de evaluación ambiental establecen dos momentos de contacto con la población, uno en la fase inicial del proyecto en la cual las empresas están obligadas a presentar a la comunidad el proyecto con los pros y los contras.
Sostuvo que el otro momento es cuando se hace el estudio de impacto ambiental y se debe presentar en una consulta pública a la comunidad que puede aprobarlo o rechazarlo.
“Si la comunidad no aprueban un proyecto no es posible desarrollarlo, el permiso social forma parte del permiso estructural de los proyectos, por eso una de las cosas que han tratado de romper las empresas que más contaminan y que resulta incómodo al Estado es ese permiso social, hay varia gente que lo han querido sacar de la ley, y ha habido resoluciones para tratar de quitarle peso, pero esas consultas sociales son obligatorias y están normadas”, manifestó.
Expertos recomiendan cumplir rol y escuchar la comunidad
Los tres expertos en temas de medio ambiente hicieron un llamado a las autoridades a cumplir con su rol de supervisor de las empresas mineras y hacer cumplir lo que establecen las leyes nacionales, principalmente respecto a la obligatoriedad de consulta social al pueblo antes de iniciar cualquier proyecto.
Pidieron a las autoridades estar vigilantes para que las consultas mineras en las distintas comunidades se realicen cumpliendo todos los requisitos, que se ofrezcan las informaciones veraces a la sociedad y que se escuche a los comunitarios.
Publicado por: Yari Araujo