Por: Joel Suriel. – El diputado de la Fuerza del Pueblo (FP), Tobías Crespo, dijo este jueves que la Reforma Constitucional que impulsan el presidente de la República, Luis Abinader, y el Partido Revolucionario Moderno (PRM), va como “caña pal’ ingenio”, debido a que no hay consenso para su aprobación, por lo que se le impondrá a todo el país.
Crespo, al ser abordado por la prensa en las inmediaciones del Congreso Nacional, dijo que el PRM no consultó al Consejo Económico Social (CES), ni ningún organismo o partido para tratar la reforma, poniendo como ejemplo a la Junta Central Electoral (JCE), organismo al que no se le consultó para tratar de imponer una unificación de las elecciones.
El congresista del Distrito Nacional señaló que de unificar los comicios, se habría de multiplicar el presupuesto, además de ampliar la cantidad de colegios, recintos y equipos de escaneo de transmisión de resultados.
También señaló que una unificación de las elecciones supondría que un primer boletín se emitiría a la 1:00 de la madrugada, poniendo a delegados trabajar 24 horas, lo que también implica la inversión de más recursos por parte de los partidos.
Tobías Crespo también criticó que los congresistas perremeístas no quieran vistas públicas en los debates de la reforma, ni que esta se haga con la Ley de Referendum como lo manda la Constitución.
“Al final ellos tienen los votos mecánicos, un Congreso Gomígrafo, es una imposición del Gobierno del presidente Abinader y el PRM”, sostuvo Crespo.
El pasado 19 de agosto, tres días después de asumir su segundo y último periodo de Gobierno, Abinader envió al Congreso Nacional el proyecto de reforma de la Constitución de República Dominicana.
La propuesta tiene cuatro objetivos principales: impedir modificaciones a las reglas de elección presidencial (limitada a dos mandatos), consolidar la autonomía constitucional del Ministerio Público y especializar sus funciones, reducir el número de representantes de la Cámara de Diputados y unificar la celebración de elecciones presidenciales, legislativas y municipales.
La iniciativa de Abinader conlleva la convocatoria de la llamada Asamblea Nacional Revisora, la unión de las dos cámaras del Congreso Nacional (Senado y Diputados) encargada de abordar la reforma de la Carta Magna.
El PRM controla el Congreso Nacional, tras haber conseguido en los comicios de mayo 29 de los 32 senadores y 146 de los 190 diputados.