Distrito Nacional. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Comisión Nacional de Emergencias y la Defensa Civil, han presentado a actores clave del Gobierno y de la sociedad civil una nueva iniciativa para fortalecer las capacidades nacionales y aumentar la resiliencia a los desastres en la infraestructura crítica de los sectores de educación y suministro de agua en República Dominicana, Cuba y Haití.
La iniciativa titulada “Fortalecimiento de las capacidades, la seguridad y la resiliencia de las infraestructuras críticas en la República Dominicana, Cuba y Haití” ha diseñado una estrategia de intervención para facilitar el posicionamiento del tema en las estructuras organizativas y niveles de toma de decisiones responsables de la gestión del riesgo de desastres en cada país.
Además, contribuirá al fortalecimiento de capacidades para la gestión del conocimiento, la facilitación metodológica, la institucionalización de instrumentos, la mejora de los mecanismos de coordinación y la intervención en vulnerabilidad, garantizando enfoques transversales, intersectoriales, de género e inclusión social.
Esta iniciativa cuenta con la financiación del Fondo Acelerador de Resiliencia de Infraestructura (IRAF) de la Coalición para la Infraestructura Resiliente ante Desastres (CDRI), en el marco de la ventana del Programa para la Infraestructura para Estados Insulares Resilientes (IRIS), en alianza con el Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo de Desarrollo Limpio.
El proyecto tiene como objetivo el aumento de la resiliencia de las infraestructuras críticas, a través del fortalecimiento de la capacidad técnica y la aplicación metodológica para evaluar la seguridad y la resiliencia de las infraestructuras. Se enfocará en infraestructuras educativas y de abastecimiento de agua a nivel nacional en República Dominicana, Cuba y Haití, con una visión inclusiva, para mejorar los mecanismos de coordinación de alerta temprana a nivel regional ante eventos climáticos, e implementar mecanismos de cooperación Sur-Sur.
En las palabras de bienvenida, Juan Salas, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias y director ejecutivo de la Defensa Civil, dijo que este tipo de iniciativas, se enmarca a las acciones preventivas que trabaja el organismo naranja, para lograr tener comunidades más preparadas ante la amenaza de cualquier evento, así como también, mayor conciencia sobre la resiliencia territorial, algo que sin dudas ayudará a salvar vidas.
En tanto, Pierre Candelon, Oficial de Medio Ambiente y Sostenibilidad del PNUD, indicó que el organismo internacional “Agradece la confianza de la CNE para llevar a cabo este proyecto, y reiteró la plena disposición del PNUD para acompañar al gobierno dominicano en la gestión de los choques climáticos y de las crisis”.
Al final de esta iniciativa, se contará con una red de 45 profesionales formados y certificados en la aplicación y uso de metodologías estandarizadas en evaluación de la seguridad y la resiliencia de las infraestructuras educativas y de abastecimiento de agua, con capacidad para multiplicar los conocimientos y disponibilidad para movilizarse a cualquier país de la región cuando sea necesario. Además, se habrán evaluado 21 infraestructuras educativas y 12 de abastecimiento de agua, con planes de intervención y mejoras funcionales en 24 infraestructuras, entre otros.
Los países de la región del Caribe, debido a su situación geográfica y a sus condiciones de vulnerabilidad (física, social, económica y medioambiental), son muy susceptibles al impacto de fenómenos relacionados con el clima y de origen geológico. El cambio climático y otras tendencias globales están provocando un aumento en la amplitud y frecuencia de las amenazas. Según el IPCC (Informe de Evaluación 6), se prevé que los ciclones tropicales y las tormentas severas se vuelvan más extremos en el Caribe.
Publicada por/Alberto Quezada