Por Carlos Arturo Guisarre. El promedio ponderado de los préstamos hipotecarios han aumentado un 23.15% desde el 31 de julio 2023 hasta el 28 de junio 2024, de acuerdo con datos extraídos del promedio ponderado de tasas activas del Banco Central de la República Dominicana.
En ese sentido, el 31 de julio de 2023 el promedio ponderado de los préstamos hipotecarios era de 10.67% anual, pero el 28 de junio de 2024 la hipoteca se transaba a un promedio ponderado de 13.14%, lo que evidencia un incremento de 2.47 puntos porcentuales.
Entonces, esa diferencia de 2.47 puntos porcentuales representa de manera nominal una variación al alza de 23.15%, lo que se suma al costo total de la adquisición de una vivienda, local comercial o solar, para aquellos que buscan hacerse de algunos de estos bienes por medio de un préstamo con garantía.
La hipoteca es esencial para la adquisición de viviendas. Pocas familias tienen los millones pesos necesarios para comprar cualquier inmueble, en cualquier sitio, por lo que el crédito asequible es fundamental para construir patrimonio de bienes raíces.
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Sin embargo, en República Dominicana ese crédito hipotecario se hace más caro, justo en el período en el que la tasa de política monetaria, costo del dinero con el que Banco Central presta de última instancia, ha caído en su expresión anual.
Solo basta ver que en julio de 2023 la tasa de política monetaria era de 7.75% anual, 0.75 puntos porcencuales más que la tasa de política monetaria de junio de 2024, que fue de 7%. Todo luce indicar que el Banco Central dejará fija esta tasa, al menos hasta el inicio del nuevo período presidencial.
Por lo tanto, mientras la tasa de política monetaria baja, el promedio ponderado de la hipoteca que llega al comprador final se ha elevado. Eso solo lo explica una expansión sustancial de la demanda de créditos hipotecarios, movida por la oferta de viviendas de todos los segmentos adquisitivos.
Los números sustentan un incremento relevante de la demanda de créditos. Las instituciones financieras de República Dominicana aumentaron sus carteras de crédito en un 15.6%, entre el 30 de junio de 2023 y el 26 de junio de junio de 2024, de acuerdo con las estadísticas monetarias y financieras armonizadas del Banco Central.
Asimismo, el 26 de junio de 2024 la cartera de crédito en pesos DOP de las instituciones financieras ascendía 1,777,999.80 millones de pesos DOP (1.78 millones de millones), mientras el portafolio de préstamos en moneda local del 30 de junio de 2023 fue de 1,537,573.10 millones de pesos DOP (1.54 millones de millones). Ese avance de un 15.6% para la cartera de créditos en pesos DOP es superior al crecimiento promedio anual del producto interno bruto para los últimos tres años.
¿Qué es una hipoteca? Un préstamo que una persona o entidad recibe de una institución financiera para comprar una propiedad, generalmente una vivienda. La propiedad comprada sirve como garantía del préstamo, lo que significa que si el prestatario no cumple con los pagos, el prestamista tiene el derecho de tomar posesión de la propiedad para recuperar el monto prestado.
La importancia de la hipoteca para el sector de vivienda en República Dominicana es significativa por varias razones, tales como el acceso a la vivienda, porque permite a las personas adquirir viviendas sin tener que pagar el precio total de una sola vez, haciendo más accesible la propiedad de una casa para una mayor parte de la población; y el impulso económico, debido a que la disponibilidad de hipotecas fomenta la demanda de viviendas, lo que a su vez impulsa la industria de la construcción y crea empleos en el sector.
Además, con las hipotecas se juega la estabilidad financiera, ya que tener una vivienda propia puede proporcionar una mayor estabilidad financiera y social a las familias, contribuyendo a su bienestar general; el crecimiento del mercado inmobiliario depende del mercado hipotecario, porque ayuda a dinamizar la adquisición de bienes raíces, permitiendo una mayor circulación de propiedades y facilitando el movimiento de capital.
Las hipotecas juegan un papel crucial en el desarrollo y crecimiento del sector de vivienda en República Dominicana, facilitando el acceso a la propiedad, estimulando la economía y proporcionando estabilidad a las familias. Su alza pone en riesgo el sueño de muchos de tener su casa.
