Miami, EFE.- El estado de Luisiana se convirtió en el primero en Estados Unidos en aprobar una ley que agrega dos medicamentos para inducir el aborto a la lista estatal de sustancias peligrosas controladas, y castigará así su posesión sin receta médica con cárcel y multas.
La medida, impulsada por los republicanos, fue aprobada el martes pasado por la Cámara Baja y hoy por el Senado estatal, y ahora solo depende de la firma del gobernador de Luisiana, Jeffrey Martin Landry, para su promulgación.
En este estado el aborto está prohibido, y por ello lo está recetar ambos medicamentos.
Puedes leer: Biden y Trump ganan las primarias de sus respectivos partidos en Luisiana
Los médicos y defensores de los derechos reproductivos han expresado alarma por la polémica medida, que incluye la mifepristona y el misoprostol, dos medicamentos usados para interrumpir embarazos, en el Anexo IV de la Ley Uniforme de Sustancias Peligrosas Controladas del Luisiana.
La nueva ley castiga hasta con cinco años de cárcel la posesión de alguno de estos fármacos sin recetas u órdenes válidas de profesionales médicos.
Sin embargo, las mujeres embarazadas que obtengan los medicamentos para su propio consumo no estarían sujetas a procesamiento, según la legislación.