El comercio local en República Dominicana se ha visto invadido por replicas baratas de productos, siendo estas falsificaciones lideradas por China, una práctica que a todas luces es ilegal, sin embargo, ni las leyes que buscan evitar las violaciones a la propiedad intelectual han podido frenar este flagelo.
El extenso listado de falsificaciones china incluye: pieza de vehículos, perfumes, cosméticos, ropa, juguetes y hasta productos farmacéuticos, esta última figuran entre las copias peligrosas más habituales.
“También están falsificando estas marcas de productos cosméticos, Por ejemplo, en los productos que usan las mujeres para para la cara, como son los polvos, los delineadores están falsificando todos esos productos de las grandes marcas que existen en el mundo”, indicó Iván García, presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes.
Cabe resaltar que las falsificaciones chinas se exhiben en la mayoría de escaparates de las arterias comerciales de nuestro país y algunos de estos productos copian el nombre de la marca tal cual, mientras que otros varían o cambian de lugar las letras pero con el mismo logotipo, envase y etiquetas.
Un ejemplo de esta situación es la adquisición en una tienda de la Duarte, de un perfume marca Boss que es una replica de la marca Hugo Boss (The Scent), el cual en su versión de 3.3 onza tiene un precio promedio en el mercado 7,496 pesos, mientras que la copia china cuesta 270 pesos, presentándose como una gran oferta para el cliente.
Así también como fragancias de la marca Victoria Secret, las cuales están cotizadas en el mercado en un precio superior a los mil pesos, sin embargo, las falsas cuestan RD$150.
De acuerdo al presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes, Iván García la presencia de tantos locales chinos en todo el país está provocando la quiebra de las tiendas tradicionales.
En tanto que el presidente de la Asociación de Empresas del Centro de Santiago (Asecensa), José Octavio Reynoso, valoró esta situación como una “competencia desleal en el mercado y sobre todo un tema de salubridad”.
Penalidad por falsificaciones
El abogado Amín Polanco, establece que la ley impone una pena de seis meses a tres años y multa que oscila entre los 50 a 1,000 salarios por casos de falsificaciones, considerando a la vez que es una “pena ínfima” en relación al daño que se produce.
Polanco destacó que en el país existe una mafia donde empleados públicos de diferente jerarquías se hacen los de la vista gorda, alegando que reciben beneficios con esta práctica.
“Una red que conforman una verdadera mafia donde empleados públicos de diferente jerarquías se hacen de la vista los ciegos, mudos y sordos luego de recibir por supuesto un buen dinerito”, sostuvo el abogado.
Al consultar a la Dirección General de Medicamentos, Alimentos y Productos Sanitarios (DIGEMAPS) sobre la inacción ante esta problemática, el director de la entidad, Leandro Villanueva se limitó a decir que hay brechas que han sido identificadas y por las que se trabaja para cerrar.
“Ahí hay brechas que hemos ido identificando que se han venido trabajando para cerrar, como por ejemplo el tema de las ceras. Hay productos que entran a través de la mudanza que no se declaran y no hacen el debido proceso. Hay productos que entran a través de los que se supone que son para uso personal y terminan en los comercios”, dijo Villanueva.
Ante las constantes denuncias supuestamente sin respuestas, Leandro Villanueva aseguró que estas conllevan de un proceso de investigación y las más graves son enviadas para que el Ministerio Público se encargue de judicializar.
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Daños a la salud
Los consumidores de productos falsificados tienden a olvidar el daño a la salud que estos pueden provocar, entre ellas alergias.
Así lo establece la dermatóloga Jeice Reynoso, quien asegura que el uso de cualquier producto puede causar alergias en la piel, pero que al tratarse de productos falsificados se podrir producir el doble, debido a que “los ingredientes que se utilizan no se saben del todo” y porque “el etiquetado del producto no está bien escrito”.
Federación Dominicana de Comerciantes pide tomar acciones
Según datos de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), China acapara el 75 por ciento de los productos falsificados que llegan a Europa y sin lugar a dudas una gran parte de los que llegan al continente americano.
Ante esta situación, las autoridades dominicanas tienen grandes desafíos en aras de garantizar una competencia comercial justa, ya que a comerciantes y distribuidores locales se le exige cumplir una serie de reglas y disposiciones para traer mercancía genuina, a comerciantes foráneos se le permite introducir sus imitaciones; agrandando las brechas de un “comercio libre”, pero diametralmente injusto.
La Federación Dominicana de Comerciantes hacen un llamado a las autoridades para frenar el tema de las falsificaciones.
