La tasa de desempleo en Latinoamérica y el Caribe continuará su tendencia descendente y bajará del 6,2 % de 2023 (siete décimas menos que en 2022) al 6,1 % en 2024, mientras que será del 6 % en 2025, según el informe mundial de perspectivas publicado hoy por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En cifras absolutas, eso supondrá una población desempleada de 19,8 millones de personas tanto en este año como en el anterior, mientras que ese número descenderá a 19,6 millones en 2025.
Los datos consolidan el regreso a las cifras anteriores a la pandemia que ya se habían evidenciado en 2022, después de que en 2020 se llegara a alcanzar una tasa de desempleo en la región del 10,2 % y el número de parados se disparara hasta los 30 millones.
El informe muestra también que la tasa de desempleo informal en la región seguirá su tendencia descendente pero aún será alta: del 52,3 % de 2022 se bajó a un 51,8 % en 2023 y se descenderá hasta el 51,7 % en 2024.
La tendencia descendente de la tasa de desempleo latinoamericano contrasta con la coyuntura global, dado que según el mismo informe en el mundo se pasará de un 5,1 % de paro en 2023 al 5,2 % en 2024, porcentaje que se espera mantener en 2025.
En cifras absolutas, supondrá que de 188,6 millones de desempleados en el año pasado se pase a 190,8 millones en 2024 y a 192,7 millones el próximo año.
La OIT prevé que la tasa de desempleo de Europa Occidental suba del 6,2 % de 2023 al 6,3 % en 2024 (de 14 a 14,3 millones de desempleados) mientras que pasará del 3,8 % al 4,2 % en Norteamérica (de 7,5 millones de parados el pasado año a 8,1 millones en el actual).
En Asia Oriental el informe predice que la tasa de paro se mantenga en el 4,7 % este año, el mismo porcentaje que en 2023, aunque el número de desempleados aumentará ligeramente, de 42,9 a 43 millones.