De acuerdo con el informe ‘El Efecto Z: tendencias de talento 2023, elaborado por la consultora de comunicación, marketing y asuntos públicos, LLYC, los nativos digitales revolucionaran la forma en la que se concibe el trabajo.
Se trata de una generación que, según los expertos, supondrá el 30% de los profesionales en 2030, impactando directamente en las normativas y creencias que se han infundado en las estructuras laborales desde generaciones anteriores. Es en definitiva el fin y comienzo de una era para el mercado laboral, una para la cual muchas empresas se deben adaptar y preparar.
Generación Z, Centennials, nativos digitales o Gen-Z, son algunos de los nombres con los que se identifican aquellos nacidos entre los años 1999 y 2012, una generación emergente que muchos pronostican impactará de gran manera el enfoque, pensamiento y estructuras de la actualidad. Criados en la era digital, con la innovación como lengua materna y acostumbrada a la interconectividad, aquellos que forman parte de esta generación presentan características únicas que están resignificando la forma en que se trabaja, se comunica y se conduce el mercado laboral.
El impacto de esta generación en el ámbito laboral se manifiesta en diversas áreas, la principal de ellas siendo su habilidad innata para la tecnología y su comprensión natural de las plataformas digitales, misma característica que ha acelerado la adopción de herramientas de trabajo en línea y colaboración remota, facilitando la transición hacia modelos de trabajo híbrido y flexible.
Destacan por su deseo de autenticidad y propósito en el trabajo, buscan roles que se alineen con sus valores personales y les permitan contribuir de manera significativa a la sociedad y dentro de esta búsqueda imprescindible por conectar con empresas que puedan articular su misión y valores de manera clara han fijado nuevas normas y precedentes para aquellas empresas que deseen atraer y retener talento joven.
¿Qué esperan los Gen-Z de las empresas?
Dentro de los parámetros que se han detectado con la entrada de Gen-Z al mercado laboral se ha identificado la gran valoración que estos jóvenes empleados tiene por las empresas que priorizan la salud mental, el manejo de la inteligencia emocional con una comunicación abierta y directa. Son una generación que espera retroalimentación constante y oportunidades para colaborar en la toma de decisiones.
Con su perspectiva han re direccionado el enfoque de las jerarquías tradicionales de liderazgo hacia unas estructuras más horizontales y participativas, donde las ideas se valoran independientemente de la antigüedad o el título.
Nuevos retos y oportunidades para atraer talento joven
Con la llegada de estas nuevas perspectivas también se han identificado los distintos choques generacionales y desafíos para la recepción de estos nuevos talentos, quienes pueden ser percibidos como impacientes debido a su crianza en una cultura de gratificación instantánea. Para ello, los empleadores han de encontrar formas de canalizar esta impaciencia hacia la productividad y el desarrollo profesional.
Con estas consideraciones y las nuevas tendencias que se han identificado es claro que la Generación Z ha llegado con grandes puntadas para el ámbito laboral, con su profunda afinidad por la tecnología, su búsqueda de propósito y autenticidad, su enfoque en la comunicación abierta y su deseo de flexibilidad están aportando un nuevo significado a la forma en que las organizaciones operan y se relacionan con sus empleados. En definitiva, a medida que sigan ingresando al mundo laboral, las empresas deberán adaptarse y abrazar estas transformaciones para aprovechar al máximo el talento y la perspectiva única que la Generación Z aportará consigo a la nueva era del mercado laboral.