En menos de dos semanas dos empleados del Instituto Nacional de Atención a la Primera Infancia (Inaipi) han sido sometidos a la acción de la justicia por robos cometidos en perjurio de la entidad pública.
Estos empleados, por separado, cometieron robos millonarios en consumo de combustible y sustracción de tabletas destinadas a los distintos Centros de Atención a la Primera Infancia (Caipi) diseminados en toda la geografía nacional.
Fredely Rafael Almonte Abreu y Johanny Mesa Santana son los empleados del Inaipi señalados por los delitos de robo agravado y robo asalariado.
En el caso de Fredely Rafael Almonte Abreu, quien cumple prisión preventiva, este es acusado por la Fiscalía de Santiago de sustraer casi RD$3 millones en el consumo de combustible, haciendo uso de una tarjeta electrónica que se le suministraba para realizar labores de la institución.
Los hechos que se le atribuyen al imputado Fredely Rafael Almonte Abreu, narrados en la instancia de solicitud de medida, indican que le fue suministrada una tarjeta de combustible en su calidad de soporte y asistente técnico de la Dirección de Tecnología de la Información y la Comunicación (TIC) del Inaipi, para realizar traslados a diferentes centros del Cibao, y para lo cual hacía uso de la tarjeta de combustible que tenía un balance mensual de $3,600 pesos.
El empleado, a fin de sustraer los fondos suministrados para la realización de sus labores, dejaba en poder de un operador de la estación de combustibles la tarjeta de consumo, para que este la pasara a lo largo del día y le entregara el efectivo.
Además, se presentaba a la estación de combustibles con diferentes personas a los cuales abastecía de combustibles haciendo uso de la tarjeta.
La Fiscalía tiene en su poder los informes que evidencian que el imputado se presentaba a la estación de combustible a bordo de un vehículo marca Chevrolet, modelo Equinox, que no pertenece a la flotilla vehicular del Inaipi para consumir el combustible y con cuyas maniobras sustrajo un monto de dos millones novecientos sesenta y seis mil doscientos cincuenta y nueve pesos con noventa y cinco centavos ($2,966,259.95).
Mientras que en el caso de Johanny Mesa Santana, al que el Ministerio Público le solicitó este viernes prisión preventiva, se le acusa de sustraer 251 tabletas de un almacén de la institución, localizado en la zona industrial de Herrera, en Santo Domingo Oeste.
Durante operativos realizados en dicho proceso, compradores de Mesa Santana han entregado de manera voluntaria 27 tabletas electrónicas, presentando además recibos de transferencias bancarias emitidos a su nombre.
El imputado enfrenta cargos por los delitos de robo asalariado, hechos descritos y sancionados en los artículos 379 y 386.3 del Código Penal Dominicano.
El órgano destacó que cuenta con elementos de prueba que sirven para demostrar la ocurrencia de los hechos y las circunstancias en que ocurrieron, además de la auditoría que permitió detectar la sustracción de los equipos.