Rafa Zafra, chef del restaurante Amar de Barcelona donde anoche cenaron las parejas Obama, Springsteen y Spielberg, no cabe de gozo este viernes tras un servicio tan especial. “Fue increíble. Por mucho que lo sueñe no hubiera imaginado juntar a tres personas tan importantes y sus señoras”, dice emocionado.
Aunque el personal de seguridad les había pedido previamente que no tomaran fotos del momento, fue Barack Obama quién, tras la cena, se dirigió a la cocina para felicitar al chef “por una de las comidas más impresionantes de su vida” y preguntó al personal si querían fotografiarse con ellos.
Hasta ayer por la tarde no tuvieron noticia en el restaurante del Palace de qué tendrían tan honorables comensales. Fue el chef José Andrés quién llamó a su colega Zafra para reservarles una mesa.
Durante el día de hoy, y antes del concierto, que se celebra a las nueve de la noche en el estadio olímpico Lluís Companys, está previsto que Barack y Michel Obama lleven a cabo diversas visitas culturales por la ciudad.
La policía catalana les escoltará en la salida del hotel y también llevará a cabo inspecciones en algunas zonas determinadas para garantizar que es seguro.
