El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó este martes al fundador de un grupo nacionalista negro, y a otros tres miembros, de trabajar para la inteligencia rusa con el fin de influir en las elecciones estadounidenses.
Omali Yeshitela, fundador del Partido Socialista del Pueblo Africano (APSP) y del Movimiento Uhuru, y otros dos miembros del partido, Penny Joanne Hess y Jesse Nevel, fueron acusados de actuar como agentes clandestinos de Rusia, un cargo que acarrea hasta cinco años de prisión.
Los tres, más otro miembro llamado Augustus Romain, también fueron acusados de conspirar para actuar como agentes para Rusia, un delito que podría sentenciarlos a más de 10 años de cárcel.
Según la acusación, los cuatro recibieron dinero y otro tipo de apoyo por parte del ruso Alexandr Ionov, residente en Estados Unidos, y de funcionarios de la inteligencia de Rusia (FSB) basados en Moscú que daban órdenes a Ionov.
El año pasado, Ionov fue acusado de ejecutar una operación de influencia política dirigida por el FSB. En ese momento sus contactos en Estados Unidos no fueron mencionados, pero el FBI allanó las instalaciones de la APSP.
Los cargos contra Ionov, quien se cree regresó a Rusia, fueron actualizados el martes en la acusación presentada en Tampa, Florida.
Bajo la fachada de ser el presidente del Movimiento Antiglobalización de Rusia, con sede en Moscú, Ionov usó la APSP y movimientos Uhuru, entre otros, para promover posturas políticas rusas, la guerra en Ucrania y otros temas.
El Departamento de Justicia dijo que todos los estadounidenses sabían que Ionov trabajaba para el gobierno ruso.