El cambio climático está convirtiendo a los toleteros de Grandes Ligas en bateadores aún más encendidos, enviando al otro lado del muro alrededor de 50 cuadrangulares más al año, reveló un nuevo estudio.
El aire más caliente y más delgado que permite que las pelotas vuelen más lejos contribuyó un poco a un aumento en los jonrones desde 2010, según un análisis estadístico efectuado por científicos de Dartmouth College y publicado el viernes en el Boletín de la Sociedad Meteorológica Estadounidense. Analizaron 100.000 partidos de Grandes Ligas y más de 200.000 batazos en los últimos años, así como las condiciones climáticas, los estadios y otros factores.
“El calentamiento global está impulsando los jonrones en Grandes Ligas”, subrayó Justin Mankin, científico climático de Dartmouth y coautor del estudio.
Es física básica.
Cuando el aire se calienta, las moléculas se mueven más rápido y se alejan unas de otras, lo que hace que el aire sea menos denso. Las pelotas conectadas con el bate llegan más lejos a través del aire más delgado porque hay menos resistencia para frenarlas. Sólo un poco más de distancia puede marcar la diferencia entre un cuadrangular y un elevado, explicó Alan Nathan, físico de la Universidad de Illinois que no formó parte del estudio de Dartmouth.
Nathan, parte de un grupo de científicos que consultó con Grandes Ligas sobre el alza de jonrones, realizó su propio cálculo basándose únicamente en la balística y la densidad del aire conforme cambia con la temperatura, y dijo que obtuvo el mismo resultado que los científicos de Dartmouth.
Tanto Nathan como el equipo de Dartmouth detectaron un aumento del 1% en la probabilidad de jonrones con cada grado Fahrenheit que se calienta el aire (1,8% con cada grado Celsius). De acuerdo con los cálculos de los científicos de Dartmouth, el promedio anual de cuadrangulares que reciben ayuda del calentamiento es solo el 1% de todos los batazos de vuelta entera.
Factores no climáticos contribuyen aún más a la descarga de pelotas que salen volando del parque, señalaron científicos y expertos del béisbol. Los factores de mayor impacto son la pelota y el tamaño de los puntos, agregó Nathan, y Grandes Ligas hizo leves ajustes para amortiguar la pelota antes de la temporada 2021. Otros factores incluyen la reciente atención de los bateadores al ángulo de lanzamiento, bateadores más fuertes y lanzamientos más veloces. El estudio comenzó luego que el final de la infame era de los esteroides en el béisbol registró un aumento en cuadrangulares.