Legisladores de distintos partidos favorecen que las autoridades dominicanas investiguen los cultos en una iglesia de la que no se tiene claro si es una secta religiosa llamada “La Luz del Mundo, la cual opera en diferentes países, incluyendo esta nación, específicamente en Los Mina, Santo Domingo Este.
Un reportaje de Nuria Investigación Periodística reveló que en varios países donde operaba esta aparente secta decenas de personas eran sometidas a abusos sexuales.
El presidente de la comisión de Derechos Humanos en la Cámara de Diputados, Juan Dionicio Rodríguez Restituyo, consideró que en República Dominicana se necesita más institucionalidad y vigilancia.
“Nosotros necesitamos más institucionalidad en RD y más vigilancia de instituciones como estas para que no pululen, todo el mundo, quiere poner una iglesia en RD y uno muchas veces no sabe cuáles son los fines que procuran poner esas instituciones”, argumentó.
En ese sentido, el también vocero del Partido Frente Amplio, sostuvo que “las autoridades correspondientes, deben de pedir un informe a estas instituciones de las actividades que realizan, ya que muchas reciben dinero público y están en el presupuesto de la nación”.
Por otra parte, el legislador por el partido reformista, Máximo Castro, aseguró que todo lo que daña a la sociedad debe ser investigado y castigado de encontrarse las pruebas.
Castro, advirtió a las autoridades correspondientes a emplearse más a fondo para proteger la sociedad y la niñez dominicana, al tiempo que indicó, si hay denuncias, la “iglesia” debe ser investigada y castigada.
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Su actual líder, quien se hace llamar el “apóstol de Jesucristo”, fue condenado a 16 años y 8 meses de prisión, en Estados Unidos, en junio de 2022, luego de declararse culpable, evitando ir a juicio y enfrentando 19 cargos incluyendo abuso sexual, violación, posesión de pornografía infantil y tráfico de personas, mediante la imposición de una cultura de sumisión sexual en la que se usa el temor a Dios como recurso de intimidación, bajo la premisa de que su entrega en cuerpo y alma al ‘Siervo de Dios’ es una ofrenda divina.