La activista ambiental Greta Thunberg reiteró su apoyo a los manifestantes contra la expansión de una mina de carbón en la localidad alemana de Lützerath tras ser detenida brevemente el martes.
“Ayer fui parte de un grupo que protestaba pacíficamente por la expansión de una mina de carbón en Alemania. La policía nos acorraló y luego nos detuvo, pero nos dejó ir más tarde esa noche”, escribió el miércoles la activista sueca en su cuenta de Twitter. “La protección del clima no es un delito”, agregó.
Thunberg, que se unió a las protestas el pasado viernes, fue arrestada junto con otros activistas que “irrumpieron” en la zona y se acercaron al borde de la mina de carbón a cielo abierto de Garzweiler 2, un lugar “empinado y extremadamente peligroso”, precisó un portavoz de la Policía.
La joven describió la expansión de la mina como una traición a las generaciones presentes y futuras y acusó a Alemania de ser uno de los mayores contaminadores del mundo.
Por otra parte, la activista se reunirá este jueves con el director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Fatih Birol, informaron los organizadores de una mesa redonda paralela a la reunión anual del Foro Económico Mundial que se lleva a cabo en Davos (Suiza), recoge Reuters.