El Centro de Investigación para la Acción Femenina (Cipaf) llevó a cabo este martes un conversatorio junto a la directora de la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Ana Güezmes, quien afirmó que en la región “el 74% del trabajo no remunerado lo realizan las mujeres.”
En el encuentro, que se realizó en la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), y en el que participaron representantes de varias organizaciones que trabajan por los derechos de las mujeres, Güezmes puso sobre la mesa la necesidad de “políticas públicas de cuidado realmente transformadoras.”
Además, afirmó que “esta transformación requiere acciones afirmativas en el ámbito fiscal, el empleo, las políticas productivas, económicas y sociales en el corto, mediano y largo plazo.”
Actualmente, 10 países de América Latina y el Caribe calculan el aporte monetario del trabajo no remunerado de los hogares. Algunas de las aproximaciones realizadas por la CEPAL en la región cuantifican que este tipo de trabajo tiene un valor de entre un 15,9% y un 27,6% del PIB. En promedio, el 74% de este aporte lo realizan las mujeres, remarca el documento.
Por su parte, el CIPAF recordó que a finales del año pasado en la XV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, los países participantes, entre ellos República Dominicana, se comprometieron a adoptar marcos normativos que garanticen el derecho al cuidado a través de la implementación de políticas y sistemas integrales de cuidado desde las perspectivas de género, interseccionalidad, interculturalidad y derechos humanos.
La organización indicó que este compromiso de los Gobiernos constituye un paso importante para avanzar hacia la sociedad del cuidado porque incluye una serie de acuerdos relativos a la necesidad de reconocer y promover medidas para superar la injusta distribución del uso del tiempo y la actual organización social de los cuidados.
Además, aseguró que es una oportunidad para lograr mayor reconocimiento del derecho de las mujeres a cuidar, a ser cuidadas y a ejercer el autocuidado; promover la corresponsabilidad en el cuidado; e implementar políticas y sistemas integrales de cuidado desde una perspectiva de interseccionalidad e interculturalidad y derechos humanos.