El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) denunció hoy tres ataques recientes contra sus trabajadores e instalaciones en Ucrania, con al menos tres muertos, y recordó a las partes en conflicto que deben “respetar el espacio humanitario” absteniéndose de este tipo de acciones.
En el ataque más reciente, este lunes, la oficina de CICR en Donetsk (este de Ucrania) fue bombardeada, lo que causó daños en el edificio y en varios vehículos, aunque no hubo muertos ni heridos, destacó la organización en un comunicado.
Un día antes, un hospital que contaba con apoyo de CICR fue atacado también en Donetsk, lo que causó la muerte de dos pacientes y heridas a otros internos, y días antes un voluntario del equipo de respuesta a emergencias para la organización falleció en un ataque con explosivos en Jersón (sur).
CICR condenó los ataques y subrayó que “el respeto al espacio humanitario es esencial para que actores neutrales e imparciales brinden ayuda a afectados por el conflicto”.
“Bajo la ley humanitaria internacional, todas las partes están obligadas a extremar las precauciones para evitar daños a civiles, incluyendo instalaciones humanitarias, unidades médicas y su personal”, recordó la organización.
EFE