Por: Joel Suriel. – El gobierno dominicano ha entrado nuevamente en una contradicción en la aplicación de medidas, esta vez con las armas de fuego, que involucra desde el presidente de la República, Luis Abinader, hasta altos funcionarios de la administración pública.
En la actualidad, el Ministerio de Defensa, a través de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad, se encuentra realizando talleres que buscan eliminar un decreto emitido en el 2006 en el que se prohíbe la importación de armas de fuego.
Mientras el presidente Abinader está a favor de educar contra las armas de fuego y la violencia, el ministro de Interior y Policía, Jesús –Chú-Vásquez, favorece eliminar el decreto 309-06 que prohíbe importar armas.
No solo el ministro Vásquez está de acuerdo con la importación de armas de fuego, también el comisionado ejecutivo de la Comisión para la Reforma de la Policía Nacional, José Vila del Castillo (Pepe), y el superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada, general Francisco Corominas.
Se recuerda que tras el asesinato a tiros del ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera, Abinader abogó por que en el país se realice una campaña contra las violencias y las armas, al tiempo de indicar que la sociedad dominicana se estaba enfermando por este mal.
“Yo creo que la sociedad debemos todos hacer una campaña en contra la violencia, en contra de las armas, es una sociedad que se está enfermando”, dijo Abinader.
En cambio, el ministro de Interior y Policía entiende que la prohibición de la importación de armas de fuego fomenta el tráfico ilegal en la nación caribeña, impulsando la delincuencia.
Vásquez dijo que a pesar de que han incautado miles de armas en el país, la mayoría son ilegales y son utilizadas para hechos delincuenciales y es lo que más preocupa al gobierno que encabeza el presidente Luis Abinader.
“Es preocupante el tráfico de armas ilegales a la República Dominicana, fíjese que nosotros hemos recuperado muchas armas, sin embargo, hay muchas armas en las calles, armas ilegales, muchas de ellas son utilizadas para la delincuencia y esa es nuestra preocupación”, dijo Chú Vásquez en una actividad que busca eliminar el decreto emitido por el entonces presidente Leonel Fernández en el 2006.
En iguales términos se pronunció el comisionado para la reforma de la Policía Nacional, José Viloria del Castillo, quien dijo que el tráfico de armas hacia el país convierte a la República Dominicana en uno de los países que menos regula este tema en el continente.
“El tráfico de armas, tanto de Estados Unidos como desde Haití, está convirtiendo a República Dominicana en uno de los mercados más desregularizados del continente”, indicó Viloria del Castillo.
También, el superintendente de Vigilancia y Seguridad, Francisco Corominas, indicó que la prohibición de importación de armas, partes y municiones dejó a las empresas de seguridad privadas y a las autorizadas a comercializar estos productos, sin los mecanismos adecuados para adquirir estos bienes, “fomentando malas prácticas, violaciones a las leyes y otros subterfugios”.
“El Estado dominicano tiene la obligación de suplir la seguridad que requieren los ciudadanos y la sociedad para realizar de forma segura todas sus actividades”, afirmó el general Corominas.
La Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada del Ministerio de Defensa realiza “Taller Intersectorial para el análisis del Impacto del Decreto 309-06, y la Pertinencia de su Derogación”, que busca analizar las regulaciones para la importación de armas de fuego y municiones para el que han sido convocadas todas las instituciones relacionadas al tema.
