Redacción Internacional, EFE.- Al menos dieciocho personas han muerto en un ataque ruso con misiles contra el distrito de Bilhorod-Dnistrovsky, en la región ucraniana de Odesa, mientras las tropas de Moscú mantienen el asedio contra la ciudad de Lisichansk.
“Región de Odesa. Hasta las 08.30 hora local (05.30 GMT) 18 personas han muerto, incluidos dos niños. 30 han resultado heridas”, escribió en su mensaje en Telegram el subjefe de la Oficina presidencial, Kyrylo Tymoshenko
En su página de Facebook, el Servicio de Emergencias ucraniano confirmó el ataque con cohetes, que atribuyó al ejército ruso, y que se produjo a las 06.00 hora local (03.00 GMT).
“Como resultado de un ataque con misiles de la aviación estratégica Tu-22 (rusa) desde el Mar Negro en el distrito Bilhorod-Dnistrovskyi, de la región de Odesa, durante la noche, tres misiles X-22 impactaron en un edificio de apartamentos de varios pisos y dos centros recreativos”, señaló, por su parte, Tymoshenko en su último informe.
El servicio de emergencias explicó que uno de los misiles había impactado en un edificio residencial de nueve plantas que había quedado parcialmente destruido.
La región de Odesa, cuya capital del mismo nombre dispone del único puerto marítimo en Ucrania que los rusos aún no controlan, es fronteriza con Moldavia y Rumanía.
CERCO A LISICHANSK
Rusia aseguró hoy que las fuerzas rusas y prorrusas han llegado a las puertas de la ciudad de Lisichansk, último bastión bajo control de Ucrania en la región oriental de Lugansk, tras haberse hecho con el control de una refinería y de otras zonas industriales en el sur y sureste.
“Las fuerzas aliadas (rusas y prorrusas) se encuentran directamente a las puertas de Lisichansk”, señaló el portavoz del Ministerio de Defensa, teniente general Ígor Konashénkov, en su parte bélico matutino.
Según el representante en Rusia de la autoproclamada república popular de Lugank (RPL), Rodión Miroshnik, las fuerzas rusas han redoblado su ofensiva sobre la ciudad de Lisichank, el último reducto ucraniano en la región oriental de Lugansk, donde atacan desde cuatro direcciones.
Agregó que desde el sur, en la zona de la fábrica artículos de goma RTI, sus tropas “no solo entraron en la ciudad, sino que efectuaron ‘operaciones de limpieza’ en las manzanas aledañas”.
Por su parte, el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, en su página de Facebook, confirma que los rusos atacan con artillería las pocas posiciones que los ucranianos mantienen en Lisichansk.
Las tropas rusas intentan rodear a las de Ucrania en las afueras de la ciudad de Lisichansk, en la región de Lugansk, desde el sur y el oeste, para hacerse con el control del último enclave ucraniano de importancia en esta región oriental que llevan asediando desde hace días.
OTRA FOSA EN MARIÚPOL
En Mariúpol se ha hallado otra fosa común con más de cien cuerpos, según el asesor de la alcaldía Petró Andryushchenko, quien agregó que las exhumaciones en esta ciudad portuaria ucraniana han quedado paralizadas definitivamente.
“Tristes hallazgos cada semana. Una nueva fosa común bajo los escombros en la margen izquierda. Una vez más, más de cien cuerpos de personas desde finales de febrero”, escribió Andryushchenko en Telegram.
“Los ocupantes retiran los escombros de las inmediaciones y, de nuevo, no se habla de volver a enterrarlos” y agregó que “la gente de hecho sigue viviendo en criptas”.
Según ese asesor municipal las autoridades rusas “están tan empeñadas en crear una imagen de recuperación que no llegan a volver a enterrar. Las tumbas callejeras temporales se están convirtiendo poco a poco en permanentes”.
MÁS MENORES MUERTOS
La invasión de Ucrania por el ejército ruso ya ha matado a al menos 343 niños en el país, y 635 han resultado con heridas de diversa consideración, informó este viernes la Oficina del Fiscal General de Ucrania en su canal de Telegram, informa la agencia local Ukrinform.
“Más de 978 niños se han visto afectados en Ucrania como resultado de una agresión armada a gran escala por parte de la Federación Rusa. Según la información oficial proporcionada por los fiscales de menores, 343 niños han muerto y más de 635 han resultado heridos”, señaló el informe.
Además, los ataques aéreos y de artillería diarios de Rusia dañaron 2.102 instituciones educativas en toda Ucrania, de las cuales, 215 fueron completamente destruidas.
La agencia Ukrinform recuerda que al menos 4.731 civiles han muerto desde el comienzo de la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero, pero las cifras reales son considerablemente más altas, ya que es difícil contabilizarlas debido a los combates.
LA ISLA DE LAS SERPIENTES
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, considera que la retirada de las tropas rusas de la isla de Zmiinyi, también conocida como isla de las Serpientes, en el Mar Negro, “cambia significativamente la situación” en esa zona para el ejército ucraniano.
Rusia anunció ayer que se retiraba de este pequeño pero estratégico enclave en el Mar Negro como “un gesto de buena voluntad”, según explicó Moscú, aunque los ucranianos consideran que se debe a que el Kremlin no puede mantener su estrategia en la zona tras haber perdido varios barcos.
“La isla Zmiinyi es un punto estratégico y cambia significativamente la situación en el Mar Negro. Todavía no garantiza la seguridad, todavía no garantiza que el enemigo no regrese. Pero ya limita significativamente las acciones de los ocupantes. Paso a paso, los expulsaremos de nuestro mar, nuestra tierra y nuestro cielo”, dijo el mandatario ucraniano en un discurso que publica en página web.
No obstante, según el presidente ucraniano, la situación en Donbas, que incluye a las regiones de Lungansk y Donetsk, “sigue siendo la más dura, extremadamente difícil”, debido sobre todo a la “superioridad de fuego de los ocupantes”.