La Iglesia Católica conmemora hoy el día de Corpus Christi, también conocido como Cuerpo de Cristo o Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo y el propósito es celebrar la presencia del hijo de Dios en la eucaristía.
Anteriormente también se le llamaba Corpus Domini, que significa Cuerpo del Señor.
Los católicos en todo el mundo recuerdan la institución de la eucaristía, que inició el Jueves Santo, durante la última cena, cuando Jesucristo convirtió el pan y el vino en su cuerpo y sangre, e invitó a los apóstoles a comulgar con él.
En República Dominicana se festeja con misas y procesiones desde la mañana a entrada la noche.
Normalmente, en la Catedral Primada de América se oficia una homilía, mientras que iglesias aledañas y en todo el país, se realizan eucaristías desde las 6:00 de la mañana.
También una procesión desde la Iglesia Las Mercedes, ubicada en la calle que lleva su nombre esquina José Reyes, de la Zona Colonial.
EL BUEY HABLÓ. En el imaginario popular dominicano se atribuye este día a un momento insólito en el que un campesino no respetó la solemnidad de este día y su reposo.
Procedió, conforme a esta leyenda, a surcar la tierra con su buey y este alegadamente habló y le reclamó: “ni siquiera el Día de Corpus Christi me dejas descansar”.
HISTORIA. El Corpus Christi es celebrado 60 días después del Domingo de Resurrección, el jueves siguiente a la solemnidad de la Santísima Trinidad, que tiene lugar el domingo posterior a Pentecostés.
La fiesta de Corpus Christi es el jueves siguiente al noveno domingo después de la primera luna llena de primavera en el hemisferio norte, y de otoño, en el sur.
Las celebraciones incluyen procesiones en las calles y lugares públicos en las cuales el cuerpo de Cristo es exhibido y acompañado por multitudes de fieles.
La celebración surgió durante la Edad Media, cuando la religiosa Juliana de Cornillon comenzó a promover la idea de celebrar una festividad que rindiera homenaje al cuerpo y la sangre de Jesucristo presente en la eucaristía.
Así, la primera celebración de Corpus Christi tuvo lugar en 1246 en la ciudad de Lieja, en la actual Bélgica.
También se cuenta que, en 1263, mientras un sacerdote celebraba la misa en la iglesia de la localidad de Bolsena, en Italia, ocurrió que, al pronunciar este las palabras de consagración, de la hostia comenzó a brotar sangre.