Un nuevo estudio publicado en Scientific Reports afirma que los delfines poseen silbidos con características propias dependiendo de su hábitat local.
Investigaciones anteriores han demostrado la variabilidad de los silbidos del delfín nariz de botella entre poblaciones, en el caso de este estudio el análisis se centró en los silbidos característicos por individuo y en las causas que provocan esa diferenciación.
El equipo de la Universidad de Sácer en Italia, liderado por Gabriella La Manna, analizó los silbidos producidos por el delfín nariz de botella en seis zonas geográficas distintas. Así lograron identificar que factores como la región, el sitio geográfico, y las condiciones ambientales y demográficas determinan los sonidos distintivos.
Los científicos encontraron que los delfines que viven en grupos pequeños tenían silbidos que cambian de tono con más frecuencia que los delfines de grupos grandes.
De igual modo, los individuos que viven en regiones con más pastos marinos tienen silbidos que son más altos en tono y más cortos en comparación con los que viven en áreas donde el fondo marino es más fangoso.
Los investigadores lograron recopilar un total de 188 horas de grabaciones, en las que encontraron 2.036 silbidos diferentes. Las variaciones de frecuencia mostraron una relación directa con el entorno, algo similar a los diferentes acentos que desarrollan los humanos según su área.
Además los científicos definieron los sonidos como “un tipo de silbido aprendido, individualmente distintivo en el repertorio de un delfín, que transmite la identidad del dueño del silbido”.
La comunicación acústica es un factor de vital importancia para los delfines, así como para los cetáceos en general. La necesitan para muchas de sus funciones como la selección sexual, la cohesión social, el reconocimiento individual y grupal, la defensa de recursos y la competencia. Además, dependen de ella para orientarse, localizar comida, reproducirse y evitar a los depredadores.
RT