Madonna pide audiencia al papa Francisco: “Me han excomulgado tres veces, pero soy una buena católica”

Lo que hay que hacer para vender discos. Madonna anunció el miércoles 4 de mayo que el próximo 24 de junio lanzará el álbum ‘Finally Enough Love’, una recopilación de cincuenta nuevas grabaciones de sus números uno. Pero por si acaso eso no bastase para agitar la industria musical, horas más tarde de anunciarlo en Twitter, publicó un nuevo curioso mensaje dirigido al Papa.

«Hola @Pontifex Francisco», ha tuiteado la cantante. «Soy una buena católica. ¡Lo juro! Quiero decir que no juro», bromea. «Han pasado varias décadas desde mi última confesión. ¿Sería posible encontrarnos un día para hablar de algunos asuntos importantes? He sido excomulgada tres veces. No me parece justo. Sinceramente Madonna», escribe la intérprete de ‘Papa Don’t Preach’ (‘Papa no prediques’).

Ya en 2016, en una entrevista aseguró que había sido excomulgada en tres ocasiones. Aunque la realidad es que no consta que sea así.

Madonna, un nombre artístico que en italiano se usa para referirse a la Virgen María, suele usar símbolos religiosos para crear escándalo (y obtener popularidad). Asegura que usa una iconografía cristiana como prueba de su devoción católica. «Siempre siento una inexplicable conexión con el catolicismo», explicó en 2016. «Aparece en todos mis trabajos, como habrán notado», añadió la intérprete de ‘como una virgen, o Like a Virgin’.

En 2006 el cardenal Ersilio Tonini lamentó la actuación de la diva en Roma, que cantaba desde una cruz y con una supuesta corona de espinas. «Hacerse crucificar en la ciudad de los papas y de los mártires es un acto de abierta hostilidad, un escándalo creado por mercaderes artísticos para atraer publicidad», dijo el cardenal. Pero eso no es excomulgarla.

Consecuencias de una exomunión

Según el catecismo, la excomunión es la pena eclesiástica más severa. Se incurre en ella automáticamente cuando se cometen ciertos pecados especialmente graves como la profanación de la Eucaristía, la violencia contra el Papa o cuando un sacerdote usa la confesión para solicitar al penitente a un acto de pecado. Los principales efectos de la excomunión son que no se pueden recibir sacramentos ni obtener cargos eclesiásticos. Sólo pueden levantarla el Papa, el obispo del lugar, o sacerdotes autorizados, aunque en peligro de muerte puede hacerlo cualquier sacerdote.

Si Madonna consigue que el Papa la escuche, probablemente hablarán de cuestiones más interesantes. Mientras tanto, le toca encontrar modos de promocionar su nuevo disco.

Fuente: La patilla