El zoológico de Brookfield en Illinois está cuidando a un delfín mular con cáncer que envejece. Su nombre es Lucky y pesa 227 kilogramos, en su mayoría músculos, pero sigue siendo un paciente muy dócil cuando su equipo de atención usa hisopos grandes para congelar el cáncer en la parte posterior de la boca.
El director médico del zoológico dice que el tratamiento parece ser efectivo, pero tratar el cáncer en una piscina presenta sus desafíos.
Los expertos realizan tomografías computarizadas y ecografías para asegurarse de que el cáncer no se haya diseminado al resto del cuerpo de Lucky.
Lucky estaba en Florida, pero en septiembre lo llevaron en avión al zoológico de Brookfield, donde pudo recibir tratamiento avanzado. Aquí es donde se va a quedar.
Los veterinarios que tratan a Lucky dicen que su tratamiento podría hacer avanzar la medicina para otros animales y debería mantener a este delfín salpicando durante los próximos años.
VOA