Peaje Sombra: las cadenas de un negocio que desangra al Estado

El acuerdo mediante el cual el Estado Dominicano cedió la construcción de la autopista que conectó a Santo Domingo con Samaná, a una compañía concesionaria a cambio de los ingresos generados por el peaje ubicado en dicha obra, mantendría encadenado al país por unos 30 años.

Dicho contrato, que fue rubricado en 2001, pero que entro en vigencia a partir del 2008, establecía además, que la empresa se encargaría de mantener la obra, mientras que el Estado, debía comprometerse a pagar un “ingreso mínimo garantizado”.

Este pago obligatorio, que se fijó para proteger la inversión privada en caso de que el flujo vehicular no generara suficiente ingresos para mantener el contrato, es lo que se denomina “Peaje Sombra”.

Hasta la fecha, esta carga ha costado a la República Dominicana 2,000 millones de pesos por año, unos 225 millones de dólares, independientes a los ingresos generados por el tránsito vehicular en la vía y sería liquidada en el 2038.

De acuerdo a estas cifras, la inversión inicial de la Autopista del Nordeste, el Bulevar Turístico del Atlántico, ya fue pagado, pues su costo fue de 151 millones de dólares.

El convenio fue rubricado por el entonces Ministro de Obras Públicas, Miguel Vargas Maldonado, con una concesionaria que, en vez usar su reputado nombre empresarial, ODINSA, creó dos empresas distintas, con los mismos nombres de las autopistas.

La Autopista del Nordeste se ejecutaría entre 2006 y 2008 y el Bulevar Turístico del Atlántico entre el 2009 y 2011, por lo que para ese entonces, quien quedó frente a la obra fue Víctor Díaz Rúa, el ministro de Obras Públicas que actualmente se encuentra involucrado en el Caso Odebrecht.

El director general de planificación del Ministerio de Obras Públicas, Miguel Ángel Logroño, afirma que el Gobierno accedió a pagar el peaje sombra pero no contaban con que se extendiera por tanto tiempo.

“Ciertamente hay una situación de que tenemos 10 años y se está pagando peaje sombra. El trabajo original y que se nos presentó indicaba siete años de peaje sombra.  Ahora, se ha aumentado, no se ha disminuido el peaje sombra y se sigue pagando”, indicó Logroño.

En aquel entonces, se realizó un estudio de tráfico para evaluar la rentabilidad de la obra y según este, se produciría una situación de ganar-ganar, gana la concesionaria por el cobro del tránsito y la cuota del peaje sombra y gana el Estado por el pago de los impuestos de la empresa y el no incurrir en gastos de mantenimiento de la vía, sin embargo, el pronóstico fue fallido.

Sin incluir lo que se recauda por el cobro de peajes, el presupuesto aumentó de 1,339 millones en 2013 a 2,588 millones en el 2018 y en el Presupuesto Nacional de este año el Ministerio de Obras Publicas desembolsaría 3,566 millones de pesos.

De igual forma se ha aumentado el costo del tránsito vehicular, en 2008, los vehículos livianos pagaban 650 pesos ida y vuelta, ahora cuesta 984 pesos, sin incluir los 23 kilómetros del Bulevar Turístico del Atlántico que da a las Terrenas, que ahora tiene un costo de 1,142 pesos ida y vuelta, por lo que el viaje de Santo Domingo a Las Terrenas cuesta 2,128 pesos.

Este precio, hace que el peaje de esta autopista sea el más caro de América Latina, por encima del de de México a Acapulco que paga 33 dólares y la vía es casi tres veces más larga que de Santo Domingo a Las Terrenas.

Para el presidente de la Sociedad Dominicana de Diarios, Persio Maldonado, el Gobierno debería continuar negociando para llegar a un acuerdo más razonable sin cancelar de forma unilateral el acuerdo para no afectar la imagen internacional del país.

“Yo diría que lo más aconsejable seria seguir negociando para ver cómo podemos poder llegar a un acuerdo más razonable en el financiamiento, porque no podemos fabricar los vehículos que tendremos un flujo que nos permitirá no recurrir al presupuesto nacional”, expresó Maldonado.

Continuó diciendo que “no hay un acuerdo fácil de decir yo te pido y tu medas sobre todo cuando el otro sabe que tiene su contrato con garantía internacionales ratificado por el país es una cerdo sumamente formal que no es fácil de deshacer”, afirmó.

Los datos sobre la cantidad de vehículos que usa el peaje y los ingresos recaudados los maneja la concesionaria, el Ministerio de Obras Públicas tiene acceso a estos mediante aforos celebrados cada tres meses con la empresa.

Este jueves 9 de diciembre el Gobierno anunció la eliminación del “peaje sombra” y la conclusión del contrato de concesión de la Autopista de Samaná, a través del  pago de US$410 millones de dólares.

El presidente Luis Abinader, dijo que ese monto, equivale a lo que habría que pagar en los próximos cuatro años y 4 meses, sin contar lo que generarían los peajes una vez hayan sido transferidos al fideicomiso estatal RD Vial.

Señaló también que esta operación generará un ahorro de aproximadamente US$1,500 millones de dólares y que se reducirá en un 20% el costo del trayecto.