De ser aprobada una nueva reforma fiscal en la República Dominicana, el Gobierno estaría añadiendo un impuesto más a la lista, y es el de las bebidas no alcohólicas con azúcar añadida, tributo que se cobra en seis países de Latinoamérica.
De acuerdo a las explicaciones del Gobierno en su proyecto de reforma fiscal, el impuesto que se pagaría sería de un 14%, con el cual se recaudaría RD$3,028.4 millones al año.
Más del 75% de los países con impuestos selectivos a las bebidas no alcohólicas con azúcar añadida han optado por impuesto específico. Estos tienden a ser preferibles a los impuesto ad-valorem porque aumenta el precio de todos los productos gravados de la misma manera, no están sujetos a la manipulación de precios de la industria, generalmente son más fáciles de administrar y proporcionan ingresos más estables pues no fluctúan con el precio.
La tasa de tributación efectiva oscila entre el 10 y el 15%.
Actualmente, este impuesto está establecido en 45 países alrededor del mundo, de los cuales seis pertenecen a Latinoamérica.
En el caso de Chile, donde se cobra este impuesto desde el 2014, se cobra un 10% en bebidas con 6,25g por 100ml 18% bebida 6.25 g de azúcar por 100ml.
Desde 2019, en Colombia las bebidas azucaradas pagan un impuesto de 19%; Ecuador, implementado en 2016 es de 0.18 dólares por 100g de azúcar.
Asimismo, desde el 2014 en México se paga un peso mexicano por litro en todas las bebidas con azúcar.
En el caso de Panamá tiene un valor escalonado desde el 2019, se cobra un 7% en bebidas carbonadas, 5% otras bebidas no alcohólicas y 10% en jarabes y concentrados para producir bebidas azucaradas.
Finalmente, en 2018 fue implementado en Perú un 25% a este tipo de bebidas con 6g de azúcar por 100ml.
L.N