El jurista Cándido Simón, quien representa a la imputada Altagracia Guillén en la Operación Medusa, sugirió que el testimonio de Rainiery Medina Sánchez, una de las acusadas en el caso, y quien está colaborando con el Ministerio Público, está siendo manipulado con alguien que “quiere hacer maldad.
Simón dijo que la Medina Sánchez está siendo “orientada de mala manera” y afirmó que, “el lenguaje que se utiliza en la declaración, que su asesor la puso a firmar, no es de su propiedad (…) porque ella es iletrada, la usaron. El lenguaje que hay en ese interrogatorio no es suyo”.
El abogado sugirió a quien supuestamente está orientando a Medina, a no hacer maldad y le instó a recordar que a él una vez le pasó lo mismo y ese hecho provocó que lo sacaran de una entidad, a pesar de que según las palabras del jurista, lo protegieron.
Este sábado la jueza Kenya Romero de la Oficina Judicial de Servicios Permanentes del Distrito Nacional, aplazó para el lunes la audiencia de medida de coerción que se realiza contra el exprocurador Jean Alain Rodríguez y otros implicados en la Operación Medusa.
Entre los demás imputados se encuentran Miguel José Moya, Rafael Antonio Mercede Marte, Alfredo Alexander Solano Augusto, Rafael Stefano Canó Sacco, Javier Alejandro Forteza Ibarra, Jonnathan Josel Rodríguez Imbert, Jenny Marte Peña y Altagracia Guillén Calzado.
El grupo es acusado de de delitos de asociación de malhechores, estafa contra el Estado, soborno, coalición de funcionarios, falsedad de documentos públicos, robo de identidad, delitos electrónicos y lavado de activos.
El órgano persecutor solicita 18 meses de prisión preventiva y declaratoria de complejo para todos los acusados.