El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva lamentó la trágica marca de 500.000 muertes por la covid-19 alcanzada este sábado en el país, la cual calificó de “genocidio”.
“500 mil muertos por una enfermedad que ya tiene vacuna, en un país que ya fue referencia mundial en vacunación. Eso tiene un nombre y es genocidio”, afirmó en sus redes sociales Lula, quien ha dejado entrever su posible candidatura en las elecciones del próximo año tras recuperar sus derechos políticos.
El líder del Partido de los Trabajadores (PT) prestó su solidaridad al pueblo brasileño, en medio del silencio del presidente Jair Bolsonaro, quien hasta el momento no hizo ninguna mención sobre los 500.000 muertos por coronavirus.
Quien sí se pronunció fue su ministro de Salud, Marcelo Queiroga, que prestó su solidaridad con todos los familiares de las víctimas de coronavirus, una enfermedad que ya deja medio millón de muertos y 17,8 millones de casos.
“Trabajo incansablemente para vacunar a todos los brasileños en el menor tiempo posible y cambiar ese escenario que nos devasta desde hace más de un año”, declaró.
El ministro de Comunicaciones, Fabio Faria, por su parte, lamentó que no se conmemoren las 86 millones de dosis de la vacuna anticovid aplicadas en el país o los 18 millones de curados de la enfermedad.
“El tono siempre es de ‘cuanto peor, mejor’. Infelizmente, ellos apoyan el virus”, agregó, en referencia a “políticos, artistas y periodistas”.
EFE