NBA Maniacs – Por fin llegó el día. Viviendo la que es su temporada 51 en la NBA desde que fueran fundados en 1970 como los Buffalo Braves, Los Angeles Clippers alcanzan por primera vez en su historia las finales de la Conferencia Oeste tras un épico sexto partido ante Utah Jazz. Y es que así fue. Estuvieron 25 puntos abajo, no contaban con Kawhi Leonard, y nada de ello les impidió firmar una remontada que entra ya en su historia con letras de oro.
¡Qué partido se ha vivido en el Staples Center! Los Clippers habían dado un golpe sobre la mesa dos días antes en Utah, pero pensar que esto estaba acabado era de ingenuos. Los Jazz, con Donovan Mitchell luchando al nivel que acostumbra, al de súper estrella, dejaron claro desde el principio que habían llegado a la costa oeste para poner el empate en la serie. Con un segundo cuarto espectacular (19-39 fue el parcial a su favor) construyeron una renta de hasta 22 puntos, la cual llegó hasta los 25 para abrir el tercero. Parecía que lo tenían controlado, pero todo lo que habían edificado se vino abajo.
Como si se tratase de la noche y el día, el encuentro cambió radicalmente en un abrir y cerrar de ojos. Del 67-88 a favor de los visitantes a 6:37 minutos para el final del tercer cuarto, se pasó al 88-90 con un 21-2 a favor de los Clippers. Eran momentos duros para los Jazz. De saborear el 3-3 pasaban ahora a sentir la presión de ser eliminados sobre sus cabezas. Necesitaban reaccionar, pero no lo consiguieron. Ya fuese por bloqueo sobre la pista o motivado por la falta de decisiones desde la pizarra de Quin Snyder, lo cierto es que la segunda mitad se convirtió en una masacre en la que los angelinos olieron sangre y no hicieron prisioneros.
Espoleados por un Staples en ebullición, los chicos de Tyronn Lue no solo se metieron en el partido, sino que lo dinamitaron con un 14 de 19 en triples en el segundo tiempo que les ayudó a llegar hasta los 81 puntos. La defensa de Utah hizo aguas. Reggie Jackson –qué serie la suya– anotaba incluso por encima de Rudy Gobert para conseguir hasta 27 puntos. Terrence Mann realizaba el partido de su vida con 39 puntos (20 en el tercer cuarto). Paul George lideraba para irse hasta los 28 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias. Hasta Patrick Beverley se sumó a la fiesta con dos enormes triples en los últimos minutos. Fue demasiado para unos Jazz incapaces de cambiar la dinámica del choque. A nueve minutos del final los Clippers tomaron el mando del partido y ya no volvieron a perderlo. Donovan Mitchell lo intentó. Suyos fueron 39 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias en otra gran actuación, pero la suerte estaba echada. 131-119 para unos Clippers eufóricos, y con razón: están en las finales de la Conferencia Oeste tras media década remando para ello.
“Ha sido una noche especial. Los vítores, la emoción de toda la gente… Podías sentir como los Clippers dejaban atrás a los Clippers para pasar de esa segunda ronda. Los playoffs tienen mucho que ver con el valor y la lucha. Es algo que hemos demostrado una y otra vez”, comenta Paul George.
Locura Mann
Sin duda es el jugador de la noche. En los cinco primeros partidos de la eliminatoria había logrado un total de 25 puntos… Anoche, en el Game 6, fueron 39. Suena irreal, pero lo cierto es que es un chico que durante toda la temporada ha apuntado que podía aportar mucho al equipo –no a este nivel por supuesto–. La eclosión de Terrence Mann llegó además cuando más falta hacía. Tras un primer tiempo complicado, los Clippers necesitaban levantarse en el tercero, algo que hicieron con hasta 20 puntos de este chico de 24 años que fue el número 48 del draft de 2019. Fue algo increíble; tanto como para que sea el único jugador de la franquicia que logra un cuarto de 20 puntos en playoffs desde 1997. Sí, fue la noche de los Clippers.
De nuevo levantan un 2-0
Los Clippers son ya el primer equipo que levanta dos serie con 2-0 en contra en unos solos playoffs. Contra Dallas llegaron al séptimo partido. En esta ocasión han sido capaces de enlazar cuatro victorias consecutivas para acabar venciendo 4-2. Además, es la primera vez que lo logra un equipo para meterse en finales de conferencia. Como decíamos, no le ha faltado épica a los californianos. Desde 1984 solo cinco equipos habían conseguido levantar un 2-0 ante el primer clasificado de su conferencia; y es que el balance es elocuente: 109-6 favor del seed 1 cuando está 2-0 arriba. Los Clippers no solo han vencido, sino que lo han hecho con un brillo especial.
Un golpe duro para Utah
Primer clasificado de tu conferencia, 2-2 en la serie y tu rival pierde a su mejor jugador… Utah parecía más favorito que nunca para llegar a las finales del Oeste y, quién sabe, tener la oportunidad de lograr su primer anillo. Ese sueño ha saltado por los aires de un modo inesperado. Ellos han seguido a lo suyo (21 de 44 en triples en el Game 6), pero es que los Clippers han dado no uno, sino muchos pasos al frente. No diremos que la baja de Leonard les ha beneficiado –sería absurdo–, pero sí que ha servido para que todos den lo mejor de sí mismos. Pese a toda esa narrativa, la realidad es que los Jazz lo han tenido en su mano. En el quinto partido estuvieron 10 puntos arriba y en el recién terminado han vencido por hasta 25. No han podido. Quin Snyder entiende que en el tercer cuarto perdieron la fluidez que necesitaban.
“Creo que nuestra ineficiencia al principio del tercer cuarto cuando se movía el balón nos llevó a recibir muchas canastas. A mitad de cancha ellos jugaron con el espacio, nos movieron y nos pisaron los talones”, señala el head coach de los de Salt Lake City. Ya sea una u otra la explicación, la realidad es que los Jazz están eliminados y que ha dolido de un modo especial. Ellos vislumbraban un enfrentamiento ante Phoenix Suns en unos días, pero serán los Clippers los que se verán las caras frente a los de Arizona (y Chris Paul) a partir del domingo.