La Fiscalía de Perú pidió este viernes protección policial para el fiscal anticorrupción José Domingo Pérez ante las amenazas recibidas por solicitar el regreso a prisión provisional de la candidata presidencial Keiko Fujimori, que afronta una acusación de 30 años de cárcel por presunto lavado de dinero.
En el documento enviado al Ministerio del Interior, la Fiscalía de la Nación pidió que “de manera urgente” se brinde “seguridad y protección policial” al magistrado, con motivo de una convocatoria en redes sociales para realizar un plantón en su domicilio.
Este requerimiento llega un día después de que Pérez solicitara revocar la libertad condicional de Fujimori para que se le imponga nuevamente prisión preventiva por supuestamente haber incumplido las normas de conducta impuestas.
El pedido del fiscal sostiene que la candidata a la Presidencia por el partido fujimorista Fuerza Popular desobedeció reglas jurídicas como la de comunicarse con testigos vinculados al caso, donde está acusada por presunto lavado de dinero en la financiación irregular de sus campañas electorales de 2011 y 2016.
Tras hacerse pública esta solicitud, tildada de “absurda” por la propia imputada, simpatizantes fujimoristas convocaron para esta noche, a través de las redes sociales, una concentración en las puertas de la vivienda del magistrado, miembro del equipo especial de la Fiscalía para investigar el caso Lava Jato en Perú.
La solicitud de Pérez llega cuando Fujimori ha solicitado anular unos 200.000 votos de las elecciones presidenciales celebradas el pasado domingo al denunciar sin pruebas un supuesto “fraude sistemático” en la contienda que le medía por la Presidencia de Perú ante el izquierdista Pedro Castillo.
A falta de contar el 0,413 % de los votos, Castillo aglutina el 50,17 % de los votos frente al 49,83 % de Fujimori, separados por un margen de unos 60.000 votos (0,34 %), que apunta a ser suficiente para el profesor y líder sindical del magisterio peruano de no ser por los recursos presentados por su rival.
En caso de que ganase Fujimori, la hija y heredera política del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000) eludiría durante el tiempo que durase el mandato la acusación del fiscal Pérez, un proceso cuyo juicio puede comenzar en breve.
Keiko Fujimori ya pasó 15 meses en prisión preventiva entre 2018 y 2020, cuando fue liberada bajo medidas judiciales restrictivas que le permitieron viajar por el país para hacer campaña en su tercera postulación consecutiva a la Presidencia de Perú, tras haber perdido en 2011 y 2016 en segunda vuelta.
Fuente: EFE
