Por Escarlin Pozo.- La diabetes y la hipertensión arterial continúan siendo las dos enfermedades crónicas de riesgo para aquellas personas que tienen COVID-19.
Según el último boletín epidemiológico, dado a conocer este sábado, de las 3,652 defunciones ocurridas a causa del coronavirus, un 27.96 % correspondía a personas con hipertensión.
De su lado, un 17.52 % guardó relación a personas con diabetes.
Este porcentaje mantiene a las personas con estas comorbilidades dentro de los grupos de riesgo de este virus.
En ese tenor, el Ministerio de Salud Pública instó a estas personas a seguir de manera estricta el tratamiento médico, una vez diagnosticada la enfermedad.
Por otra parte, aconsejó seguir una alimentación adecuada, hacer ejercicios y a siempre usar mascarillas, tanto en espacios cerrados y abiertos, donde haya una concentración moderada de personas.
Lo que dice la OMS y OPS
Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) han puesto especial atención en estas dos enfermedades durante esta crisis sanitaria por la COVID-19.
Durante una publicación informativa, la OPS aclaró que la probabilidad de tener complicaciones serias y enfermarse gravemente por la COVID-19 es mayor en las personas con diabetes.
“No es que sea más probable que contraiga el virus sino que, si usted se enferma por COVID-19, tiene mayor probabilidad de morir debido a las complicaciones graves que las personas que no tienen diabetes”, explicó.
Diabetes en el mundo
Según datos arrojados por la OPS, en la actualidad, se estima que a nivel mundial 62 millones de personas en las Américas padecen diabetes mellitus, tipo 2.
Otro dato compartido, en esta ocasión por el Atlas de la Diabetes, indica que para el 2040 un total de 109 millones de personas padecerán esta enfermedad.
Hipertensión arterial
En cuanto a la hipertensión arterial, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo durante una conferencia que los países debían poner especial interés para actuar contra la COVID-19 durante la pandemia.
Esta declaración, repetida en diferentes alocuciones, se debía a que las personas con hipertensión corren mayor riesgo de presentar un cuadro grave.