Los puertorriqueños completamente vacunados ya no tendrán que usar mascarilla en espacios al aire libre y se amplía a 75% de la capacidad total la ocupación máxima en establecimientos privados que atiendan público, incluidos restaurantes, según establece la nueva orden ejecutiva contra la covid-19 anunciada este jueves.
El gobernador Pedro Pierluisi presentó en una conferencia de prensa la nueva orden ejecutiva que entrará en vigor el próximo lunes y será efectiva hasta el 4 de julio, y supone un importante paso hacia la normalización total en la isla, que el jefe del Ejecutivo dijo llegará en un mes o mes y medio.
Pierluisi subrayó que esta relajación de medidas responde a la buena marcha de la vacunación, que como explicó alcanza ya a cerca de la mitad de los 3,2 millones de puertorriqueños, a la vez que alentó a la población a inmunizarse.
De acuerdo con el gobernador, la buena marcha de la vacunación sitúa a la isla entre los cinco territorios del mundo con mejores estadísticas.
“Podrá cantarse victoria cuando se alcance la inmunidad de rebaño y eso está muy cerca”, resaltó Pierluisi, tras dejar claro que se reserva la potestad de dar marcha atrás a las decisiones hoy anunciadas si se registraran rebrotes preocupantes.
La nueva orden permite además la apertura de bares, discotecas y salones de juego a 50 % de la capacidad máxima del lugar.
Los bares y chinchorros (bares populares) al aire libre no tienen límite de aforo, pero se deberá mantener el distanciamiento físico de seis pies entre personas que no sean de la misma unidad familiar.
También se amplía a 50 % la ocupación máxima en los coliseos, mientras que los restaurantes podrán abrir las 24 horas del día, pero entre la medianoche y las cinco de la mañana deberán servir a sus clientes mediante el modelo de entrega o recogida y no podrán vender bebidas alcohólicas.
Pierluisi sostuvo que Puerto Rico ha sido muy conservador en las medidas preventivas respecto a otras jurisdicciones de Estados Unidos y que, de hecho, esa mesura es la que ha hecho que hoy no se anunciara una vuelta a normalidad previa al inicio de la pandemia en marzo de 2020.
“Las medidas que hemos tomado para protegernos, así como el énfasis en la estrategia de vacunación, han permitido que todos los indicadores sigan bajando y al fin estamos viendo las tasas de positividad más bajas. Las hospitalizaciones por la covid-19 están en solo alrededor de 100 personas, una reducción considerable, y la tasa de positividad está en 2 %”, expresó el gobernador.
EFE