Piden los Cemíes sean traídos de vuelta a RD; el de Roma es de madera y ámbar, el de Turín de algodón

Expertos plantean que el Cemí que reposa en el museo de Pigorini, Roma, es tan único y extraordinario como la otra pieza de la cultura taína de algodón, que reposa en la Universidad de Turín, Italia.

Explican que aunque el Cemí de Pigorini no es de algodón, del que solo existe uno en el mundo, su diseño es una mezcla de madera, algodón y ámbar y sugieren que plasma el encuentro de la llegada de los europeos al país y los taínos.

En reportaje realizado en el programa Nuria Investigación Periodística, los estudiosos de esta pieza expresan su interés de que tanto el Cemí de algodón que está en la Universidad de Turín, como el que reposa en el museo de Pigorini, en Roma, sean traídos al país.

Sobre el Cemí de Pigorini se han escrito algunos ensayos y artículos a nivel internacional, como es el caso de las investigadoras de la cultura hispanoamericana  en Fordham University de Nueva York, Dana Leibsohn y  Barbara Mundy, quienes establecen que este Cemí,  fue creado poco después de la llegada de los europeos a la Hispaniola.

“El Cemí de Pigorini fue creado de una mezcla entre materiales locales e importados, lo que sugiere cómo los taínos respondieron ante la introducción de materiales españoles y Africanos”,refiere Leibsohn y Mundy.

El escritor italiano Danilo Manera dijo que este ídolo es muy antiguo y lo ubica luego del contacto de la llegada de los europeos, y afirma que tiene elementos europeos y africanos.

“Un Cemí magnífico también, es un Cemí bifronte, es decir que tiene una cara de animal y una cara de hombre”, manifestó.

El director del Museo del Hombre Dominicano, Cristian Martínez, vivió en Italia en la década del 80, tiempo en el que se dedicó estudiar la pieza.

“Yo le examine la cara  y decían los estudios una cara de madera, pero te digo yo lo tuve una semana tres horas al día y por una ventana que entraba luz del sol y tenía un reflejo, para mí, no es de madera, sino que tenía ámbar”, afirmó.

Explicó que ese ídolo tiene los vidriecitos europeos y espejos, razones por la que estima simboliza el momento del encuentro de la cultura europea y antillana y  por esos tiene un gran valor.

A continuación, detalles ampliados en el reportaje sobre el Cemí de Pigorini, realizado por Nuria Investigación Periodística.