A propósito del Día Nacional de la Juventud, la organización humanitaria, World Vision República Dominicana, informó que el país ocupa el primer lugar en América Latina y el Caribe con la tasa de desempleo juvenil más alta. En la región, 22 millones de jóvenes ni estudian ni trabajan (generación NINI), de los cuales 850,000 son dominicanos.
“En un país donde el 40% de sus habitantes son jóvenes, hablar de su formación y sus oportunidades son una necesidad. Creemos que es imperativo e inaplazable que las autoridades y todos los organismos pongan la vista en esta problemática”, indicó la organización cristiana radicada en 99 países, con el objetivo de crear espacios de prevención, desarrollo y seguridad para niños y niñas junto a sus comunidades.
El 40,3% de los habitantes de la República Dominicana, se encuentran entre las edades de 18 a 35 años acorde a los registros de la Junta Central Electoral, por lo que la organización alertó sobre su importancia y las facilidades requeridas para su desarrollo.
World Vision abogó por el acceso de los jóvenes a programas educativos que estén en consonancia con lo requerido por el mercado laboral, incluyendo formación técnica, capacitaciones en habilidades para la vida y acompañamiento en los procesos de inserción al empleo.
El país ocupa el primer lugar de América Latina y el Caribe con un 29%, mientras que en los demás países de la región la tasa es de un 17%, según los datos extraídos del estudio “Los jóvenes dominicanos: esos desconocidos”, publicado en marzo 2019, que contempla a personas de entre 15 a 29 años.
En América Latina, 56 de cada 100 jóvenes no tienen trabajo y enfrentan muchas otras problemáticas que le impiden su desarrollo.
500 millones de jóvenes del mundo viven con el equivalente de RD$90.00 por día, de acuerdo con los informes del Fondo de Población de las Naciones Unidas.
En ese contexto, World Vision consideró como “imperativo e inaplazable que las autoridades pongan la vista en este flagelo que hace años viene creciendo, enfocando al país como primer lugar en desempleo juvenil”.
Propuso la formulación de políticas públicas que apunten a la raíz del problema y aporten soluciones oportunas, innovadoras y de largo plazo, en vez de concentrarse en las consecuencias.
La organización valoró como necesario garantizar el acceso de los jóvenes a programas educativos que, además de estar en consonancia con lo requerido por el mercado laboral dominicano, deben incluir formación técnica, capacitaciones en habilidades para la vida, orientación vocacional y acompañamiento en los procesos de inserción al empleo que impulsen un crecimiento económico y social que dé como resultado un mejoramiento significativo en su calidad de vida.
Afirmó que, para lograr esto, es necesario que se produzca una sinergia intencional y productiva entre los organismos estatales pertinentes (Ministerio de la Juventud, Ministerio de Trabajo, Ministerio de Educación), organizaciones de la sociedad civil y el sector empresarial que garantice una correlación de fuerzas capaz de crear, implementar y fortalecer los mecanismos del derecho de la juventud a la inserción laboral, con el fin de presentar mejores cifras nacionales en los próximos años.