El director ejecutivo del Consejo Nacional de la Persona Envejeciente (Conape), José García Ramírez, exhortó a los adultos mayores a ser receptivos y optimistas con el plan de vacunación contra el COVID-19 que será ejecutado por el Ministerio de Salud Pública.
Invitó a toda la población envejeciente a ser receptiva y acudir a los puestos de vacunación cuando el gobierno indique, para que reciban el beneficio de la vacuna y puedan protegerse del coronavirus.
“Yo, como servidor público, como médico con más de 50 años de ejercicio profesional y en mi condición de envejeciente, me vacunaré, desde que las vacunas anti-covid-19 estén disponibles en el país. Confío plenamente en su calidad y efectividad. Apoyo absolutamente el gran esfuerzo que está realizando el Gabinete de Salud del gobierno dominicano para afrontar el COVID-19. Considero que lo más seguro es vacunarse tal como lo ha señalado recientemente el presidente Luis Abinader”, destacó el galeno.
Destacó que el Conape está concientizando en los asilos y hogares de día, resaltando la necesidad de la vacuna y los beneficios que este procedimiento aportaría a la prevención del COVID-19.
Sostuvo que confía plenamente en la calidad de las vacunas que el Gobierno dominicano contrató con la farmacéutica inglesa AstraZeneca, la estadounidense Pfizer-BioNTech y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Se recuerda que la semana pasada, el Gobierno estimó que, antes de diciembre próximo, 7,101,043 individuos, en edades comprendidas entre 18 a 80 años y más, habrán recibido la vacuna contra la COVID-19 antes del mes de diciembre, mediante una campaña que alcanzará coberturas superiores al 95% de la población de al menos el 80% de los municipios del país.
Puntualizó que República Dominicana ha contratado un total de 20 millones de dosis de vacunas con diferentes suplidores:
- AstraZeneca: 10 millones de dosis
- Pfizer/BioNTech: 8 millones de dosis
- COVAX: 2 milones de dosis
Indicó que el esquema de vacunación necesita dos dosis por persona y los grupos priorizados serán las poblaciones con riesgo significativamente elevado de enfermedad grave o muerte como: adultos mayores y grupos con comorbilidades.
Además, poblaciones con riesgo significativamente elevado de infección como trabajadores sociales y de la salud.
El plan contempla una aplicación por etapas. “Las fases estarán definidas de acuerdo a las características de los grupos de riesgo priorizados, el volumen y la periodicidad de abastecimiento de vacunas, el posicionamiento y promoción de la vacunación en la población, entre otros importantes aspectos”, detalló la Dirección General de Comunicación de la Presidencia de la República a través de su cuenta en Twitter.