La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y miembros del Ministerio Público, ocuparon dos calderos con doble fondo rellenos de cocaína que serían enviados a España.
Los calderos iban en una caja de cartón y trataron de llevarlos a ese país a través de una compañía internacional de envíos, ubicada en el Distrito Nacional.
De acuerdo al informe, para desviar la atención de las autoridades el paquete iba junto a otros utensilios típicos del país como café, ollas, paquetes de menta verde, rolos, un juego de dominó y varios rollos de papel.
La cocaína camuflada en el doble fondo de los calderos, tuvo un peso preliminar de 850 gramos de cocaína, según el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF).
Según las primeras informaciones, el envío se habría realizado desde una residencia de un sector de la parte alta del Distrito Nacional y sería recibido por un hombre con domicilio en un apartamento de Madrid, España.
Las autoridades amplían las investigaciones en torno al caso, mientras siguen redoblando las operaciones de interdicción en contra del narcotráfico y sus delitos conexos.